Es viernes. Y sigo nervioso. Esto de saber que tengo los días contados en la empresa…
La lectura de hoy es curiosa y un tanto misteriosa. Jesús andaba echando demonios y le acusaban de ser un enviado de Belcebú. Jesús, flipando, les dice que un reino en guerra civil no es capaz de aguantarse, por lo que si el demonio andara echando piedras sobre su tejado no prosperaría su reino. Y que si el lo hace con el poder de Dios quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a nosotros.
También habla que el que está con él, no puede estar con el demonio y que quien no está con el desparrama (aconsejo leer la lectura, que desvarío mucho, o quizá desparramo, jajaja).
La parte interesantísima y misteriosa, por tanto, difícil de entender (por lo menos para mi) es esa que dice que si un demonio es echado de un cuerpo, vaga por el desierto y que, al verse perdido y sin entretenimiento acaba volviendo al cuerpo de donde salió. Al volver encontrará la casa limpia y recogida, por lo que avisará a más demonios y todos se instalarán ahí.
Vamos, que no podemos bajar la guardia. Esto quiere decir que una vez limpios, tras la confesión, por ejemplo, o que hayamos sido ayudados en alguna ocasión, tendremos que permanecer alerta. Aunque más bien más acostumbrados a vivir en el amor. Me lío y no soy capaz de darme a entender. Quiero decir que una vez que obremos mal, y veamos cada vez más normal la maldad, o que la encontremos razonable y justificada, estamos condenados a que el mal se apodere de nosotros. Es decir, que nos parezca bien el mal.
Y yo me negaré a ve bien algunas cosas que la sociedad acaba por imponer como justo o bueno. No quiero entrar en ejemplos, pero pondré uno: siempre estaré en contra de quitar una vida, sea la de un recluso que cometió crímenes horrendos, sea una persona que aún no ha nacido o una persona que ha perdido la esperanza de vivir.
Ahora es cuando toca mojarse en los comentarios, je, je. Este párrafo anterior tiene mucha miga ¿no? Pues eso.
Ahí va la foto de mi afeitado. Todos dicen que estoy más feo. En fin, si es que la barba tapa, digan lo que digan, y uno no es un adonis, qué le vamos a hacer.
La lectura de hoy es curiosa y un tanto misteriosa. Jesús andaba echando demonios y le acusaban de ser un enviado de Belcebú. Jesús, flipando, les dice que un reino en guerra civil no es capaz de aguantarse, por lo que si el demonio andara echando piedras sobre su tejado no prosperaría su reino. Y que si el lo hace con el poder de Dios quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a nosotros.
También habla que el que está con él, no puede estar con el demonio y que quien no está con el desparrama (aconsejo leer la lectura, que desvarío mucho, o quizá desparramo, jajaja).
La parte interesantísima y misteriosa, por tanto, difícil de entender (por lo menos para mi) es esa que dice que si un demonio es echado de un cuerpo, vaga por el desierto y que, al verse perdido y sin entretenimiento acaba volviendo al cuerpo de donde salió. Al volver encontrará la casa limpia y recogida, por lo que avisará a más demonios y todos se instalarán ahí.
Vamos, que no podemos bajar la guardia. Esto quiere decir que una vez limpios, tras la confesión, por ejemplo, o que hayamos sido ayudados en alguna ocasión, tendremos que permanecer alerta. Aunque más bien más acostumbrados a vivir en el amor. Me lío y no soy capaz de darme a entender. Quiero decir que una vez que obremos mal, y veamos cada vez más normal la maldad, o que la encontremos razonable y justificada, estamos condenados a que el mal se apodere de nosotros. Es decir, que nos parezca bien el mal.
Y yo me negaré a ve bien algunas cosas que la sociedad acaba por imponer como justo o bueno. No quiero entrar en ejemplos, pero pondré uno: siempre estaré en contra de quitar una vida, sea la de un recluso que cometió crímenes horrendos, sea una persona que aún no ha nacido o una persona que ha perdido la esperanza de vivir.
Ahora es cuando toca mojarse en los comentarios, je, je. Este párrafo anterior tiene mucha miga ¿no? Pues eso.
Ahí va la foto de mi afeitado. Todos dicen que estoy más feo. En fin, si es que la barba tapa, digan lo que digan, y uno no es un adonis, qué le vamos a hacer.
4 comentarios:
YELEEEEEEEEE MI RANA Y SU SONRISAAAAAA JEJEJEJE ESA QUE NO FALTE.
PARECES UN RICO.
BUEN FIN DE SEMANAAAAAAAAAAAAAA
BESOS PARA LOS DOS
Raro,raro raroooooooooo(lease con voz de "papuchi Iglesias" jajajaja...),eso es lo que se me hace verte así,aunque ya nos tenías acostumbrad@s con la foto del perfil...¿¿??.
Pues si que la llevamos clara...se van pero vuelven con toda la "trouppe"...ainssssss...pues si que está bueno el remedio...
No creo que nosotr@s seamos,ni tengamos el poder para debatir si algo(de lo que tú propones) está bien ó mal...cada uno es dueño de su vida y que haga lo que esté dentro de sus convicciones y pensamientos en esos momentos...creo que tendríamos que vernos en el caso("nunca digas de este agua no beberé" y el VIVE Y DEJA VIVIR intento llevarlos a "rajatabla".)Espero que este comentario no te moleste...
Un besote y féliz fin de semana!!!
Podremos dar el criterio que tengamos, pero juzgar es muy arriesgado.
Hay cosas que por defecto están mal, y los ejemplos que has puesto son claro idem de lo dicho, pero no podemos juzgar a quién lo haga porque como bien dice melocotón nadie sabe como actuar si llega el temido momento.
A veces he llegado a decir que mataría con mis propias manos a quién fuese capaz de arrebatarme a mis hijos ( es decir, que les hagan un daño más allá del físico), y me asusta pensarlo porque creo que soy capaz.No estaría bien (sobre todo si me pillan), pero a mis manos haría MI justicia. Hasta lo tengo pensado, me inyectaría una droga para que ello sirviese de atenuante, y luego con decir que me volví loca por la sustancia.... AH!!!! se siente!!!!!.
Mil besos, que me veo hoy un poco terrorífica.
Jolines cualquiera comenta terninado de leer los comentarios... estoy acojonada... pues no se que decir un beso Reales jajaja ;)
Publicar un comentario