No quisiera empezar el post hoy sin agradecer vuestros comentarios. Deciros también que mis bromas sobre el Evangelio son eso, bromas. Pero a través de las gracias mucahs veces me expreso mejor que si en serio hablara. Gracias por estar ahí.
Es curioso. Esta mañana, unas nubes se empeñaban en no dejarme ver despuntar el sol. Aunque es una hora antes después del cambio horario, ahora se ve más bonito amanecer. Sras. nubes: Deben ustedes saber, que por más que se empeñen en tapar ese sol que tanto necesito por las mañanas, YO SÉ QUE ESTÁ AHÍ Y QUE ESTÁ AMANECIENDO. Sus intentos de aguarme el día no tendrán éxito. Váyanse a llover por ahí, que falta hace.
Este fin de semana ha sido tranquilo. Lo empecé con mucho cansancio y empecé hoy cansado. Y es normal, porque me quedé ayer hasta las 0:41 levantado viendo "El libro negro", la peli de nazis de A3. Dejé grabando el final, detrás de AIDA, que también grabé. Mi guapísima estaba algo acatarrada, por lo que el sábado noche nos quedamos en casita, pese a que habíamos quedado con los amigos.
Por la tarde estuvimos viendo dos peliculas que grabamos en la madrugada del sábado de La2. Una de Kirk Douglas y Kim Novak ("Conociendo a un extraño") y la otra con Jennifer Aniston ("The Good Girl"). Las dos peliculas iban sobre los cuernos puestos en el matrimonio. No voy a comentar hoy nada de este tema, pero sí diré que la segunda película era un poco deprimente. Va de una mujer que lleva una vida triste, un matrimonio triste, un trabajo triste... Y lo cojonudo de todo esto es que viédolo, hasta tú, que eres el espectador, estás de acuerdo con la protagonista en que lleva una vida triste. ¿Cuantas personas pensarán que llevan una vida triste? ¿No seremos nosotros mismos los que hacemos tristes nuestras vidas? HAY QUE DAR SALERO A NUESTRAS VIDAS, empezando el día con una sonrisa, por ejemplo. La primera cuesta, incluso será falsa en muchas ocasiones. Pero una vez acostumbrado el músculo, esa sonrisa será reflejo de nuestra alma, así que, A PRACTICAR.
Por alguna razón, se ha trasladado al día de hoy la festividad de la Anunciación. La lectura narra la aparición del Arcángel San Gabriel a María. Me hace gracia como María no se asusta de tal aparición. yo hubiera dado un grito que se me hubiera oído en Murcia. Cuando el ángel le saluda, ella lo primero que piensa es que qué saludo era ese. Por más que lo pienso no sé muy bien a qué se refiere este hecho. Como no sea que ella esperaba que llamara primero a lapuerta o algo así... Seguramente sea poqrue lo primero que le dijo fue algo así como llena eres de Gracia o Dios te salve o similar.
Lo importante es que que le anuncian que ella va a ser herramienta de los planes de Dios. Y ella ACEPTA gustosa. ¿Aceptamos nosotros la voluntad divina? Igual podemos decir que María lo tuvo fácil. Dios envió un Ángel para decirle lo que quería de ella. La podía haber dejado preñada sin más señas a ver qué pasaba. Nosotros no, tenemos que buscar un ratito de silencio para poder escucharLe y saber qué queire de nosotros. María, con ventaja ya se puede, ¿eh?. Pero no pensemos que lo tuvo fácil. Quizá tenía los ojos y los odios bien abiertos. Y aún más abierto el alma. ¿A cuantos ángeles les hemos dado con la puerta en las narices? Sí, amigos, sí. A nosotros también nos llegan mensajeros divinos (de la muerte) a los que no recibimos. Así que a abrir puertas y ventanas, para que nos inunde ese soplo fresco que nos ventile el alma.
Una playa como cofete vale para perderse en soledad, bien acompañado y para pensar.
lunes, 31 de marzo de 2008
viernes, 28 de marzo de 2008
¡Es el Señor!
Es lo que gritó uno de los que más amaba a Jesús. Quizá el primero en reconocerle. En la lectura de hoy se habla de la tercera vez que se apareció Jesús a sus discipulos después de haber resucitado. Estaban los pobrecillos pescando cuando un hombre desde la orilla les pregunta que si han pesacado algo. Al contestarle que no, les dice que echen las redes al otro lado. Y vuelve a suceder como antaño que las redes no pueden. Dice el Evangelio que nada más y nada menos pesaron 153 peces. Demasiados para una red tan pequeña. Me preguntó a qué vienen estas exactitudes. Qué mas da que fueran 80 que 153 peces.
Otra cosa curiosa es que cuando Juan le dice a Pedro que es el Señor, este, que estaba pescando en pelotas, se pone la túnica y se lanza al agua estando a 100 metros de la orilla. Qué efusividad! Imagino que haría calor. Me recuerda a Espinete, que anda en pelotas todo el día y se pone el bañador para ducharse o el pijama para dormir. Pedro debe ser el espinete de la época.
Finaliza con el regreso a la orilla y, ante unas brasa preparadas por Jesús, almuerzan juntos algún pez de esos 153.
Después de esta Semana Santa, que nos tiene que reconfortar tras la Gran Vigilia Pascual, muchos de nosotros hacemos como os apóstoles. Volvemos a nuestros quehaceres, a nuestra triste monotonía de lluvia tras los critales (de vida quería decir, se me escapó) y nos olvidamos de lo que Dios quiere de nosotros. Y así nos va. Menos mal que se nos aparece de vez en cuando y, reconociéndolo nuestra vida mejora. Así que a seguir buscándole toca. Que no ha resucitado para nada. Olvidemos nuestros "hombres viejos" que éramos y seamos el "hombre nuevo". tomémonos un almuerzo con Él, que ya nos tiene preparadas las brasas.
Esta mañana despuntaba el sol en Tarraco, Ubi vero aerenum est (Tarragona, donde la primavera es eterna). Pero a medida que me acercaba a Barcelona, el cielo gris era el macho dominante. Hablando ayer con mi amigo Josu, que trabaja cerca de Durango, me decía que hacía 2 meses que no veía el sol y que tanto día gris le estaba afectando el ánimo. Yo agradezco el cargarme las pilas por las mañanas con los primeros rayos de sol. Me ayuda a recordar que por encima de esas nubes grises siempre está el Sol calentándonos regalandonos el día. Imagino que aquellos que sólo ven días grises se olvidan que hay un Sol más arriba y comprendo su desolación. Deber ser algo así como los que creyeron alguna vez en Dios y ahora dudan de que alguna vez existiera. HAY VIDA MÁS ALLÁ DE LAS NUBES GRISES.
Dicen que van a multar a los que dilapiden el agua. ¿Y la Generalitat? ¿Se multará así misma por tener una tubería de abastecimiento sin arreglar perdiendo metros cúbicos de agua día tras día? ¿Es que sus errores los tenemos que pagar todos por las multas?
También han adjudicado a dedo informes sobre el escarabajo verde, el olor de las nubes y pichadas parecidas. ¿A quién va y para que va ese dinero justificado con esos informes? ¿Quienes son esos amigos? ¿No revertirá seguramente en mejoror los tristes sueldos que creen tener? Estos de la Generalitat no me dan buena sensación.
Los demás seguiremos trabajando con esfuerzo para ganarnos el pan. Ya sabemos que las grandes fortunas, no se consiguen de una forma totalmente honrada. Desconfiad del dinero fácil. Es una felicidad efímera. Lo que fácil viene, fácil se va. Pero eso sí, quien no juega a la lotería, no le tocará nunca.
A seguir bien.
Otra cosa curiosa es que cuando Juan le dice a Pedro que es el Señor, este, que estaba pescando en pelotas, se pone la túnica y se lanza al agua estando a 100 metros de la orilla. Qué efusividad! Imagino que haría calor. Me recuerda a Espinete, que anda en pelotas todo el día y se pone el bañador para ducharse o el pijama para dormir. Pedro debe ser el espinete de la época.
Finaliza con el regreso a la orilla y, ante unas brasa preparadas por Jesús, almuerzan juntos algún pez de esos 153.
Después de esta Semana Santa, que nos tiene que reconfortar tras la Gran Vigilia Pascual, muchos de nosotros hacemos como os apóstoles. Volvemos a nuestros quehaceres, a nuestra triste monotonía de lluvia tras los critales (de vida quería decir, se me escapó) y nos olvidamos de lo que Dios quiere de nosotros. Y así nos va. Menos mal que se nos aparece de vez en cuando y, reconociéndolo nuestra vida mejora. Así que a seguir buscándole toca. Que no ha resucitado para nada. Olvidemos nuestros "hombres viejos" que éramos y seamos el "hombre nuevo". tomémonos un almuerzo con Él, que ya nos tiene preparadas las brasas.
Esta mañana despuntaba el sol en Tarraco, Ubi vero aerenum est (Tarragona, donde la primavera es eterna). Pero a medida que me acercaba a Barcelona, el cielo gris era el macho dominante. Hablando ayer con mi amigo Josu, que trabaja cerca de Durango, me decía que hacía 2 meses que no veía el sol y que tanto día gris le estaba afectando el ánimo. Yo agradezco el cargarme las pilas por las mañanas con los primeros rayos de sol. Me ayuda a recordar que por encima de esas nubes grises siempre está el Sol calentándonos regalandonos el día. Imagino que aquellos que sólo ven días grises se olvidan que hay un Sol más arriba y comprendo su desolación. Deber ser algo así como los que creyeron alguna vez en Dios y ahora dudan de que alguna vez existiera. HAY VIDA MÁS ALLÁ DE LAS NUBES GRISES.
Dicen que van a multar a los que dilapiden el agua. ¿Y la Generalitat? ¿Se multará así misma por tener una tubería de abastecimiento sin arreglar perdiendo metros cúbicos de agua día tras día? ¿Es que sus errores los tenemos que pagar todos por las multas?
También han adjudicado a dedo informes sobre el escarabajo verde, el olor de las nubes y pichadas parecidas. ¿A quién va y para que va ese dinero justificado con esos informes? ¿Quienes son esos amigos? ¿No revertirá seguramente en mejoror los tristes sueldos que creen tener? Estos de la Generalitat no me dan buena sensación.
Los demás seguiremos trabajando con esfuerzo para ganarnos el pan. Ya sabemos que las grandes fortunas, no se consiguen de una forma totalmente honrada. Desconfiad del dinero fácil. Es una felicidad efímera. Lo que fácil viene, fácil se va. Pero eso sí, quien no juega a la lotería, no le tocará nunca.
A seguir bien.
jueves, 27 de marzo de 2008
Reflexión de tripi
En este post voy a plasmar una reflexión de esas que aveces pongo a mayores al post que pretendo sea diario. con este tipo de reflexiones personales seguramente mis queridos y amados lectores se vayan forjando una idea acerca de mi forma de entender e interpretar el sms de Jesús. ¡Qué gracia!, he puesto sms y me imaginaba a Jesús ahí, a la diestra del Todopoderoso con el móvil en mano mandándome mensajitos, con politonos y todo. Aquí me dirá la fruta naranja que de qué color era el tripi de hoy, marca y todo.
En mi tierna adolecescencia me dió por leer los evangelios apócrifos, dejándome llevar por esa curiosidad juvenil acerca del pensamiento de aquellos considerados "non gratos" por la curia vaticana.
Un pasaje que me dió tranquilidad y del que desconozco el por qué no lo cuenta ningún evangelista en alguno de los evangelios sinópticos, seguramente porque no lo consideró necesario o es mentira, de ahí que aparezca en los apócrifos, en fin, que me enrollo. El pasaje cuenta como Jesús dice a sus discípulos que no se les ocurra invocar a los espíritus, que les dejen tranquilos, porque lo más sencillo que ocurriera es que se les apareciera un espíritu inmundo que les haría mal y, que en ese caso, Jesús no les defendería. Pero eso sí, si por algún motivo a un espíritu maligno se le ocurría hacernos mal sin nosotros haberle llamado, entonces sólo tenemos que nombrarle, pues Él mismo nos haría intocables. Vamos, que nos defendería. Que ningún espíritu malo maloso tenía nada que hacer frente a Jesús.
Cuando leí este pasaje, me reconfortó ver escrito en un sitio como aquél algo que yo ya presentía. Más me hubiera gustado que apareciera en uno, al menos, de los 4 evangelios reconocidos por los Santos Padres, pero incluso ahí, sentí una gran verdad.
Siempre creí que teniendo Fe, nada tenía que temer. También tenía el presentimiento de que no era bueno invocar a los espíritus, salvo al Santo, que para el que no lo sepa, la Santa Misa es una Gran Sesión de Espiritismo. Aquí alguno se acojona y deja de ir a misa, otro dirá que qué burrada acabo de decir. ¿Acaso no invocamos al Espíritu Santo? ¿Qué es la consagración si no?
Hay una monja que canta por ahí (aquí me imagino una monja por la calle cantando como una loca por los portales, ja, ja, ja, dejaré los tripis) una canción que me gusta especialmente. La letra dice algo así como que: "¿Por qué tengo miedo? Si nada es imposible para ti" Tengo especial confianda en la vida, con miedo a veces, pero confianza en que Dios está conmigo y grcias a eso, puedo hacer frente a cualquier situación, por mala que sea.
A mi amigo el cura, hace ya por lo menos 10 años desde que me lo sigue recordando, le hace gracia la vez que le dije que yo en la vida me siento PROTEGIDO. Y este es un sentimiento que me gustaría tuviera el resto de la gente que no lo tiene. Incluso bajo esa protección es dífícil no experimentar miedo y desasosiego, pero lo dicho, me siento protegido. Quizá por eso no le tengo gran temor a los espíritus. Aunque cuando luego en sueños se me aparece un fantasma me cago patas abajo, ja, ja, ja.
Y eso es todo por ahora, besines para todos.
En mi tierna adolecescencia me dió por leer los evangelios apócrifos, dejándome llevar por esa curiosidad juvenil acerca del pensamiento de aquellos considerados "non gratos" por la curia vaticana.
Un pasaje que me dió tranquilidad y del que desconozco el por qué no lo cuenta ningún evangelista en alguno de los evangelios sinópticos, seguramente porque no lo consideró necesario o es mentira, de ahí que aparezca en los apócrifos, en fin, que me enrollo. El pasaje cuenta como Jesús dice a sus discípulos que no se les ocurra invocar a los espíritus, que les dejen tranquilos, porque lo más sencillo que ocurriera es que se les apareciera un espíritu inmundo que les haría mal y, que en ese caso, Jesús no les defendería. Pero eso sí, si por algún motivo a un espíritu maligno se le ocurría hacernos mal sin nosotros haberle llamado, entonces sólo tenemos que nombrarle, pues Él mismo nos haría intocables. Vamos, que nos defendería. Que ningún espíritu malo maloso tenía nada que hacer frente a Jesús.
Cuando leí este pasaje, me reconfortó ver escrito en un sitio como aquél algo que yo ya presentía. Más me hubiera gustado que apareciera en uno, al menos, de los 4 evangelios reconocidos por los Santos Padres, pero incluso ahí, sentí una gran verdad.
Siempre creí que teniendo Fe, nada tenía que temer. También tenía el presentimiento de que no era bueno invocar a los espíritus, salvo al Santo, que para el que no lo sepa, la Santa Misa es una Gran Sesión de Espiritismo. Aquí alguno se acojona y deja de ir a misa, otro dirá que qué burrada acabo de decir. ¿Acaso no invocamos al Espíritu Santo? ¿Qué es la consagración si no?
Hay una monja que canta por ahí (aquí me imagino una monja por la calle cantando como una loca por los portales, ja, ja, ja, dejaré los tripis) una canción que me gusta especialmente. La letra dice algo así como que: "¿Por qué tengo miedo? Si nada es imposible para ti" Tengo especial confianda en la vida, con miedo a veces, pero confianza en que Dios está conmigo y grcias a eso, puedo hacer frente a cualquier situación, por mala que sea.
A mi amigo el cura, hace ya por lo menos 10 años desde que me lo sigue recordando, le hace gracia la vez que le dije que yo en la vida me siento PROTEGIDO. Y este es un sentimiento que me gustaría tuviera el resto de la gente que no lo tiene. Incluso bajo esa protección es dífícil no experimentar miedo y desasosiego, pero lo dicho, me siento protegido. Quizá por eso no le tengo gran temor a los espíritus. Aunque cuando luego en sueños se me aparece un fantasma me cago patas abajo, ja, ja, ja.
Y eso es todo por ahora, besines para todos.
Presentación a los discípulos
Hola a todos. Hoy me he levantado a las 5:50 de buen humor, como tiene que ser. El mar marcaba una línea nítida de horizonte, calmo, sin ruido, una balsa. Los rayos del sol naciente luchaban por atravesar la nube que ocultaba su alumbramiento. Un día perfecto. Si el mar se presenta sosegado, quizá el día permanezca igual. Me relajo y me sosiego. Hoy voy a hacer un gran día. Los días nacen solos, pero nosotros tenemos que hacer de ellos buenos o malos (días). Y hoy no quiero enturbiar ese mar tranquilo.
Jesús se presenta ante unos discípulos incrédulos. Sorprendidos. Que me sorprenda yo, vale, pero que se sorprendan ellos que convivieron con él… Les invita a tocarle, les enseña sus heridas. Soy yo. Y les abre los ojos y el entendimiento de las escrituras.
Hoy se me ha presentado a mi a través de ese mar que quiere ser lago. Y lo he visto y así os lo cuento. Pues, al igual que los discípulos, a partir de ese momento tengo la obligación de transmitir a los pueblos el perdón de sus errores (no les llamo pecados). A ellos les dijo que empezaran por Jerusalén, y yo, empezaré por mi zona también, por los que me rodean.
Me releo y sí, parece que me he tomado un tripi como dicen por ahí, ja, ja, ja. Y cierto es, que no quiero al “proyecto hombre”. Prefiero caer en la adicción de esta droga llamada Jesús y creer en el proyecto que quiere para los hombres.
Hoy oía en la radio que aparece la imagen de un señor barbudo con una tripa cervecera. Pero no es una tripa cervecera. Se trata de un transexual que se chuta inyecciones de testosterona diarias y aún no se ha extirpado ni el útero ni los ovarios. Y en esa barriga cervecera lo que hay es una personita de 22 semanas. Desde luego, a este señor (porque quiere dejar de ser señora) no podrán decirle que no a la adopción de un bebé por su condición particular de ser. Quiero decir, que en previsión a que quisiera tener hijos y una administración mojigata, más mojigata que la misma Iglesia Católica Apostólica y Romana, le denegara ese derecho, de esta manera, tendrá un hijo de su sangre y de su carne. Lo que no sé si habrá pensado en todas las burlas que tendrá el niño por parte de sus crueles compañeros de escuela cuando tenga que explicarles que su padre fue primero su madre. En fin, cosas que pasan. Igual si la crueldad del hombre no fuera tan vil, no tendríamos tantos problemas en aceptar condiciones tan extrañas que se dan en la decisión de las personas.
Este párrafo da pie al debate. Espero haceros pensar.
Jesús se presenta ante unos discípulos incrédulos. Sorprendidos. Que me sorprenda yo, vale, pero que se sorprendan ellos que convivieron con él… Les invita a tocarle, les enseña sus heridas. Soy yo. Y les abre los ojos y el entendimiento de las escrituras.
Hoy se me ha presentado a mi a través de ese mar que quiere ser lago. Y lo he visto y así os lo cuento. Pues, al igual que los discípulos, a partir de ese momento tengo la obligación de transmitir a los pueblos el perdón de sus errores (no les llamo pecados). A ellos les dijo que empezaran por Jerusalén, y yo, empezaré por mi zona también, por los que me rodean.
Me releo y sí, parece que me he tomado un tripi como dicen por ahí, ja, ja, ja. Y cierto es, que no quiero al “proyecto hombre”. Prefiero caer en la adicción de esta droga llamada Jesús y creer en el proyecto que quiere para los hombres.
Hoy oía en la radio que aparece la imagen de un señor barbudo con una tripa cervecera. Pero no es una tripa cervecera. Se trata de un transexual que se chuta inyecciones de testosterona diarias y aún no se ha extirpado ni el útero ni los ovarios. Y en esa barriga cervecera lo que hay es una personita de 22 semanas. Desde luego, a este señor (porque quiere dejar de ser señora) no podrán decirle que no a la adopción de un bebé por su condición particular de ser. Quiero decir, que en previsión a que quisiera tener hijos y una administración mojigata, más mojigata que la misma Iglesia Católica Apostólica y Romana, le denegara ese derecho, de esta manera, tendrá un hijo de su sangre y de su carne. Lo que no sé si habrá pensado en todas las burlas que tendrá el niño por parte de sus crueles compañeros de escuela cuando tenga que explicarles que su padre fue primero su madre. En fin, cosas que pasan. Igual si la crueldad del hombre no fuera tan vil, no tendríamos tantos problemas en aceptar condiciones tan extrañas que se dan en la decisión de las personas.
Este párrafo da pie al debate. Espero haceros pensar.
La foto de Ciriaca es del día antes de irme de Salamanca. Por darle una última vuelta antes de irme.
miércoles, 26 de marzo de 2008
Le conocimos al partir el pan
Hoy iba a poner las únicas fotos que dan constancia de mi presencia en Salamanca la pasada Semana Santa( ya me las mandó mi amiga E.) Pero como el ordenador se ha vuelto loco no me ha dejado, lo intentaré mañana.
Es la leche esto de los accidentes en las obras. Imaginad una zanja de 5 m de profundidad y 4 metros de ancho, esto es, entre bordes de zanja. Pues esta zanjita cruza una calle (por la que es evidente que en lo que no cierre la zanja no podrá pasar nadie) por la que habitualmente pasa la gente para acceder a un paso anivel y cruzar las vías del tren. Pues hoy mismo casi nos tenemos que pegar con ciertos zopencos que dicen que tienen que pasar y que van a pasar que si les vamos a pegar. ¿Cómo le explico al juez que me condenará a prisión cuando uno de estos me empuje y se caiga a la zanja partiéndose el cráneo que yo lo único que hacía era trabajar y que el fulano en cuestión me amenazó si no le dejaba pasar antes de morir? Soy carne de prisión amigos. Se te mete la gente en zona de obra, (saltándose el recinto cerrado con valla por el paso que entran los camiones) haciendo el caso omiso a los carteles de prohibido el paso, te pones delante y les dices que están en zona de obra y que no pueden pasar, te preguntan que cuántos como tú les va a impedir el paso... Hace dos semanas que se pusieron carteles al mismo lado del paso, con leta grande en negro, fondo amarillo que no se lo salta un gitano, todo esto para que se busquen un paso alternativo, que al fin y al cabo, la obra consiste en un paso inferior bajo la vía del FFCC para que en un futuro no muy lejano puedan atravesar las vías con total seguridad. Pero NO SIRVE DE NADA. A ver si mañana pasa el guardia urbano y es testigo de esto, para cuando alguno de estos energúmenos se mate, sea testigo que yo le avisé de la prohibición.
En fin, hoy dos discípulos del entonces crucíficado van caminando y se les aparece un tercero e, incluso habiendo compartido caminatas y sudores con él, son incapaces de reconcerle hasta que no le ven partir el pan. ¿Cuantas veces se me habrá plantado delante de las narices Dios mismo y no me he dado cuenta? Hoy creo que unas cuantas veces, y a punto he estado de ordenar que le dieran un golpe en la cabeza con el cazo de la máquina y enterrarlo en la zanja que estoy abriendo.
Bueno, conseguí subir las fotos hoy.
T'a mañá.
martes, 25 de marzo de 2008
¡He visto al Señor!
Y suponemos que lo vío sin tripis.
Comienza hoy una tarea ardua. La de querer creer. Hoy he querido levantarme de buen ánimo. Asombrosamente, hoy parece que hay más luz a las 7:00 de la mañana que hace una semana a la misma hora. He querido ayudarme en levantar el estado de ánimo de mi primer día de trabajo tras las vacaciones mirando el amanecer sobre el mar, que tan bien me hace todas las mañanas. CASI ME QUEDO CIEGO. El sol estaba muy alto y brillaba de lindo. Demasiada luz de golpe. Ha sido como mirar a Dios a la cara. Ahora entiendo por qué dicen que hay que prepararse antes de mirar a Dios, para no quemarte. Entiéndase que, cuando uno mira a Dios, en realidad lo que hace es verse a sí mismo desde otra perspectiva. Y muchas veces da miedo mirar a Dios, porque lo único que vemos son nuestras miserias y, si no estamos preparados para verlas desde el amor de Dios, nos pueden autoajusticiar. Algo así como cuando el motorista fantasma coge a un delincuente y este mira al fondo de las cuencas de la calavera y lo único que ve es todo el mal que ha hecho y, es este mal, quien acaba matándolo.
Sí, estoy muy peliculero. Estas vacaciones me dejaron en Divx el Motorista Fantasma y, aunque es una chorrada de pelicula, este aspecto de ajusticiamiento me llama la atención, puesto que es el propio mal de los delincuentes los que les ajusticia. Otra peli que echaon en la TV y no pude ver fue la del exorcista: el comienzo. Si no la habéis visto, no sigáis leyendo este párrafo porque puede que os destripe el final. Tras muchas muertes de los personajes que salen por la bestia, el mal encarnado en la forma en que más terror nos da, de repente el prota se da cuenta de una gran verdad. En el momento en que se está enfrentando al diablo en una de sus formas, justo cuando le va a atrapar es consciente de una gran verdad. Y salvando la vida, le dice al diablo:"No existes -refiriéndose al bicho que se le presenta-sólo existes en mi cabeza como miedo, pues el mal en sí no existe. Sale del corazón del hombre. Y me niego a que de mi corazón salga tanto mal". O algo así. Recalco eso, que el mal sale de notrosos mismos y de nosotros depende que crezca. En ese momento, el bicho que se lo iba a comer desapareció. Ante esta reflexión, no entiendo que relación existe entre esta película y la clásica del exorcista, pero una reflexión tan profunda en una película que pretendió ser taquillera, pues me sorprendió.
Hoy, nuestra querida María Magdalena, que fue a buscar a su queridísimo Jesús, se encuentra con un sepulcro vacío. Y un hombre al que ella no reconoce, le pregunta que a quién busca. Al decirle este que está buscando donde no debe, ella le reconoce y le abraza casi ahogándolo. Imaginad la sorpresa de ella y la estupefacción. Si lo vió crucificado y hecho un guiñapo hace tres días. Tan asquito estaba que daba pena. Y ahí lo tiene delante, irreconocible. Bendita ella que vió al Señor. Ahora nos toca a nosotros "verlo", recién resucitado. Pero mucho me temo que, al igual que aquella señorita, vamos a tener que mirar dos veces y fijarnos un poquito más. Y si tienes el día como yo hoy, te va a costar verle.
Y es que este año he tenido que verme la película de Mel Gibson (La Pasión) para concienciarme un poco más de lo que fueron aquellos días para Jesús. La oración por sí sola no ha bastado. Y es que este año la Vigilia Pascual ha dado un poco de pena (desde mi punto de vista). Este año no llevé la guitarra al coro, puesto que como la hija de la señora (mi gran amiga M, debería decir) que se molesta todos los años en preparar los cantos, moniciones, ofrendas, etc, no tenía intención de venir, con un menda que desde hace 12 años ha estado dándole salero al coro no han contado, pues no tenían elegidas todas las canciones para guitarra. Y luego un coro de señoras místicas que no entonan ni con Ricola ni con Juanolas... Qué pena de coro. Hasta la canción más alegre parecía de funeral. COÑO, QUE ES LA GRAN VIGILIA PASCUAL. El día más feliz del mundo mundial. Pero nada. Un poco triste.
Y las procesiones, qué gracia. Me contaba mi hermana que fue a ver la de "La Soledad". Entre el frío y los escasos capuchinos que le defraudó bastante. Debo decir que ella se considera atea. Y para más INRI (valga la redundancia, ja,ja) entre la gente que se ponía a cada lado de la calle, justo donde estaba ella, hubo quienes estuvieron a punto de llegar a las manos entre insultos de alto voltaje por haberse colocado delante y no dejar ver a los de atrás. Me río yo de quienes van a ver las procesiones, para que luego me vengan diciendo de sentimientos y vainas de esas. Mi hermana flipaba, desde su ateísmo. Es que ni educación les quedaba -me decía.
¿Y los que van descalzos con grandes cruces, cadenas, o los que se flagelan? No voy a hablar de ellos porque cogía el látigo y sí iban a saber lo que es bueno. Me parecen mercaderes en medio del templo. Pero cambio de tema que no quiero enrollarme. Eso de las "promesas" me saca de quicio.
Veía en la TV el domingo por la mañana haciendo zaping la procesiones, una del cristo resucitado y otra de la virgen que sale con manto negro y al encontrarse con cristo resucitado le quitan el amnto negro y aparce con uno blanco con exquisitos bordados. Al asunto, se encuentan ambos pasos en la plazo mayor y, ante el aplauso de los asistentes, turistas y paisanos míos de adopción, por que soy manchego y no de Salamanca, alzan y mueven las figuritas como si de niños jugando con el Ken y la Barbie, que ahcen que se encuentren y se den un morreo. Que conste que yo nunca jugué con el Ken y la Barbie, sobre todo porque mi hermana no tenía Ken. Aunque sí le levantaba el vestidito a la Barbie para ver que tenía debajo, je, je. Se me ve el plumero en que no me gusta mucho el que el amor de Cristo se quede en un juego de muñecas. Cierto es que muchos pasos son esculturas de gran valor histórico, bien hechas según la idea del artista de su época. También me falta el mínimo respeto hacia los que basan su religión en estas figuritas y lloran cuando no pueden sacar su muñeco a la calles porque llueve y se estropea. Sé que debo ser más humilde. Pero es superior a mis fuerzas. Ni siquiera voy a besar los pies a la figurita que representa a Cristo en los oficios del Viernes Santo. Ya sé que no hay que ser tan extremista y que sólo es un símbolo. Pero al igual que me obligo a comulgar, me cuesta ir a besar un trozo de madera, escayola, bronce o marfil.
Espero no haber ofendido a nadie. Igual algún día acabo respetando estas costumbres (espero que no).
He borrado dos comentarios de "alguienes" que dice que pinches en su enlace. Para evitar que perjudiquen a incautos os he eliminado. Quizá sean lugares con virus o así. No sé si instaurar de nuevo el sistema de identificar las letritas, pero como a mi tía no le hace gracia, de momento voy a dejarlo así.
A ver si mi amiga E. me envía las fotos que nos sacamos en Salamanca en aquél café y las puedo publicar.
Hasta mañana si Dios quiere.
Comienza hoy una tarea ardua. La de querer creer. Hoy he querido levantarme de buen ánimo. Asombrosamente, hoy parece que hay más luz a las 7:00 de la mañana que hace una semana a la misma hora. He querido ayudarme en levantar el estado de ánimo de mi primer día de trabajo tras las vacaciones mirando el amanecer sobre el mar, que tan bien me hace todas las mañanas. CASI ME QUEDO CIEGO. El sol estaba muy alto y brillaba de lindo. Demasiada luz de golpe. Ha sido como mirar a Dios a la cara. Ahora entiendo por qué dicen que hay que prepararse antes de mirar a Dios, para no quemarte. Entiéndase que, cuando uno mira a Dios, en realidad lo que hace es verse a sí mismo desde otra perspectiva. Y muchas veces da miedo mirar a Dios, porque lo único que vemos son nuestras miserias y, si no estamos preparados para verlas desde el amor de Dios, nos pueden autoajusticiar. Algo así como cuando el motorista fantasma coge a un delincuente y este mira al fondo de las cuencas de la calavera y lo único que ve es todo el mal que ha hecho y, es este mal, quien acaba matándolo.
Sí, estoy muy peliculero. Estas vacaciones me dejaron en Divx el Motorista Fantasma y, aunque es una chorrada de pelicula, este aspecto de ajusticiamiento me llama la atención, puesto que es el propio mal de los delincuentes los que les ajusticia. Otra peli que echaon en la TV y no pude ver fue la del exorcista: el comienzo. Si no la habéis visto, no sigáis leyendo este párrafo porque puede que os destripe el final. Tras muchas muertes de los personajes que salen por la bestia, el mal encarnado en la forma en que más terror nos da, de repente el prota se da cuenta de una gran verdad. En el momento en que se está enfrentando al diablo en una de sus formas, justo cuando le va a atrapar es consciente de una gran verdad. Y salvando la vida, le dice al diablo:"No existes -refiriéndose al bicho que se le presenta-sólo existes en mi cabeza como miedo, pues el mal en sí no existe. Sale del corazón del hombre. Y me niego a que de mi corazón salga tanto mal". O algo así. Recalco eso, que el mal sale de notrosos mismos y de nosotros depende que crezca. En ese momento, el bicho que se lo iba a comer desapareció. Ante esta reflexión, no entiendo que relación existe entre esta película y la clásica del exorcista, pero una reflexión tan profunda en una película que pretendió ser taquillera, pues me sorprendió.
Hoy, nuestra querida María Magdalena, que fue a buscar a su queridísimo Jesús, se encuentra con un sepulcro vacío. Y un hombre al que ella no reconoce, le pregunta que a quién busca. Al decirle este que está buscando donde no debe, ella le reconoce y le abraza casi ahogándolo. Imaginad la sorpresa de ella y la estupefacción. Si lo vió crucificado y hecho un guiñapo hace tres días. Tan asquito estaba que daba pena. Y ahí lo tiene delante, irreconocible. Bendita ella que vió al Señor. Ahora nos toca a nosotros "verlo", recién resucitado. Pero mucho me temo que, al igual que aquella señorita, vamos a tener que mirar dos veces y fijarnos un poquito más. Y si tienes el día como yo hoy, te va a costar verle.
Y es que este año he tenido que verme la película de Mel Gibson (La Pasión) para concienciarme un poco más de lo que fueron aquellos días para Jesús. La oración por sí sola no ha bastado. Y es que este año la Vigilia Pascual ha dado un poco de pena (desde mi punto de vista). Este año no llevé la guitarra al coro, puesto que como la hija de la señora (mi gran amiga M, debería decir) que se molesta todos los años en preparar los cantos, moniciones, ofrendas, etc, no tenía intención de venir, con un menda que desde hace 12 años ha estado dándole salero al coro no han contado, pues no tenían elegidas todas las canciones para guitarra. Y luego un coro de señoras místicas que no entonan ni con Ricola ni con Juanolas... Qué pena de coro. Hasta la canción más alegre parecía de funeral. COÑO, QUE ES LA GRAN VIGILIA PASCUAL. El día más feliz del mundo mundial. Pero nada. Un poco triste.
Y las procesiones, qué gracia. Me contaba mi hermana que fue a ver la de "La Soledad". Entre el frío y los escasos capuchinos que le defraudó bastante. Debo decir que ella se considera atea. Y para más INRI (valga la redundancia, ja,ja) entre la gente que se ponía a cada lado de la calle, justo donde estaba ella, hubo quienes estuvieron a punto de llegar a las manos entre insultos de alto voltaje por haberse colocado delante y no dejar ver a los de atrás. Me río yo de quienes van a ver las procesiones, para que luego me vengan diciendo de sentimientos y vainas de esas. Mi hermana flipaba, desde su ateísmo. Es que ni educación les quedaba -me decía.
¿Y los que van descalzos con grandes cruces, cadenas, o los que se flagelan? No voy a hablar de ellos porque cogía el látigo y sí iban a saber lo que es bueno. Me parecen mercaderes en medio del templo. Pero cambio de tema que no quiero enrollarme. Eso de las "promesas" me saca de quicio.
Veía en la TV el domingo por la mañana haciendo zaping la procesiones, una del cristo resucitado y otra de la virgen que sale con manto negro y al encontrarse con cristo resucitado le quitan el amnto negro y aparce con uno blanco con exquisitos bordados. Al asunto, se encuentan ambos pasos en la plazo mayor y, ante el aplauso de los asistentes, turistas y paisanos míos de adopción, por que soy manchego y no de Salamanca, alzan y mueven las figuritas como si de niños jugando con el Ken y la Barbie, que ahcen que se encuentren y se den un morreo. Que conste que yo nunca jugué con el Ken y la Barbie, sobre todo porque mi hermana no tenía Ken. Aunque sí le levantaba el vestidito a la Barbie para ver que tenía debajo, je, je. Se me ve el plumero en que no me gusta mucho el que el amor de Cristo se quede en un juego de muñecas. Cierto es que muchos pasos son esculturas de gran valor histórico, bien hechas según la idea del artista de su época. También me falta el mínimo respeto hacia los que basan su religión en estas figuritas y lloran cuando no pueden sacar su muñeco a la calles porque llueve y se estropea. Sé que debo ser más humilde. Pero es superior a mis fuerzas. Ni siquiera voy a besar los pies a la figurita que representa a Cristo en los oficios del Viernes Santo. Ya sé que no hay que ser tan extremista y que sólo es un símbolo. Pero al igual que me obligo a comulgar, me cuesta ir a besar un trozo de madera, escayola, bronce o marfil.
Espero no haber ofendido a nadie. Igual algún día acabo respetando estas costumbres (espero que no).
He borrado dos comentarios de "alguienes" que dice que pinches en su enlace. Para evitar que perjudiquen a incautos os he eliminado. Quizá sean lugares con virus o así. No sé si instaurar de nuevo el sistema de identificar las letritas, pero como a mi tía no le hace gracia, de momento voy a dejarlo así.
A ver si mi amiga E. me envía las fotos que nos sacamos en Salamanca en aquél café y las puedo publicar.
Hasta mañana si Dios quiere.
viernes, 14 de marzo de 2008
El Padre está en mi y yo en el padre.
Hoy es viernes, la felicidad efímera de este día corre por mis venas. Es evidente que me refiero a una felicidad de viernes que se superpone a lo que viene siendo la felicidad de Dios que me pretendo agarrar a diario. Hoy el espectáculo marino me obsequiaba con unas brumas que bien podríanser las de Avalon. Me gusta. Parece indicar que el día comienza de forma misteriosa. Me espera un día misterioso. uyuyuyuy....
A eso de las 13 h pretendo salir disparado para Tarragona, comer en casa y dar una vuelta en Ciriaca, que estará la pobre sin circular hasta que vuelva de Salamanca.
La lectura de hoy me gusta especialmente. Se conoce que ese Señor, rodeado de judíos con piedra en mano se defendía como podía de sus acusaciones. A estos señores, como pasa hoy día, no les gustaba que viniera alguien proclamándose hijo de Dios. Ay, benditos! Si somos todos hijos de Dios. La diferencia entre Él y los judíos (o muchos de nosotros) es que Dios está en nosotros pero nosotros no en Él. Pero no es por esto por lo que me gusta si no por lo siguiente. Jesús, mientras se afanaba en zafarse de ser apedreado, les decía que si no creían esto de que el Padre estaba en él, que al menos creyeran en sus obras. Y eso es lo que realmente importa. A la humanidad, a las iglesias cristianas, a todos en general, nos iría mejor andar practicando el bien que en dilucidar si somos o no divinos o lo fue o no ese hombre.
Ayer por la noche, una moza de 20 añitos fue apuñalada, se cree que por su pareja, pero no le han pillado aún. Tan jóvenes y ya con arrebatos que hacen asesinar. Si van a tener razón los "expertos" de que uno de cada 5 españoles estamos a un tris de desarrollar una enfermedad mental.
Oía en la radio esta mañana que querían modernizar el Islam para que valiera para los tiempos que corren. Qué gracia me hace eso. ¿Religiones modernizándose? ¿Es que puede modernizarse el amor? El amor ha sido, es y será siempre el amor. ¿Acaso le buscaremos otros significados?
Se me ocurrió el otro día, investigando entre las cosas del blogger, poner una encuesta sobre si al que me lee le gustaría conocerme. Aunque el voto es anónimo, sospecho quién ha podido votar. Os puedo decir también que yo votaría también que sí en conocer a los autores de los blogs que leo. Estoy descubriendo que esto de los blogs, son una estupenda forma de encontrar personas con pensamientos que nos gusta compartir, escuchar, pensemos o no igual, pero que nos abren un abanico de posibilidades para poder ver la realida desde otro punto de vista. Qué coño, hacer amigos. El otro día me imaginaba a alguien que me paraba por la calle, me llamaba por mi nombre y me preguntaba que qué tal estaba. Podría ser alguien que me lee, que nunca se ha presentado pero, por lo que sea, le gustaba lo que ponía y se sentía cercano a mi por simpatía de pensamiento. Me pregunto cual sería mi reacción, si de miedo porque pudiera ser un asesino en serie o de agradable sorpresa pero con desconfianza. Imagino que si no se hubiera presentado en el blog, sólo me leyera,mi reacción sería de desconfianza, y de alegría si fuera, por ejemplo, Tiatan. En fin, ya me gustaría encontrarme con ella por casualidad por la calle y ser yo quien la reconociera a ella antes que ella a mi. Sólo por ver la cara que pondría. Lo que no sé si me atrevería a saludar. Al fin y al cabo uno es extrovertido de palabra, pero tímido en realidad.
Bueno, un buen finde a todos. (y a santificarse esta semana)
A eso de las 13 h pretendo salir disparado para Tarragona, comer en casa y dar una vuelta en Ciriaca, que estará la pobre sin circular hasta que vuelva de Salamanca.
La lectura de hoy me gusta especialmente. Se conoce que ese Señor, rodeado de judíos con piedra en mano se defendía como podía de sus acusaciones. A estos señores, como pasa hoy día, no les gustaba que viniera alguien proclamándose hijo de Dios. Ay, benditos! Si somos todos hijos de Dios. La diferencia entre Él y los judíos (o muchos de nosotros) es que Dios está en nosotros pero nosotros no en Él. Pero no es por esto por lo que me gusta si no por lo siguiente. Jesús, mientras se afanaba en zafarse de ser apedreado, les decía que si no creían esto de que el Padre estaba en él, que al menos creyeran en sus obras. Y eso es lo que realmente importa. A la humanidad, a las iglesias cristianas, a todos en general, nos iría mejor andar practicando el bien que en dilucidar si somos o no divinos o lo fue o no ese hombre.
Ayer por la noche, una moza de 20 añitos fue apuñalada, se cree que por su pareja, pero no le han pillado aún. Tan jóvenes y ya con arrebatos que hacen asesinar. Si van a tener razón los "expertos" de que uno de cada 5 españoles estamos a un tris de desarrollar una enfermedad mental.
Oía en la radio esta mañana que querían modernizar el Islam para que valiera para los tiempos que corren. Qué gracia me hace eso. ¿Religiones modernizándose? ¿Es que puede modernizarse el amor? El amor ha sido, es y será siempre el amor. ¿Acaso le buscaremos otros significados?
Se me ocurrió el otro día, investigando entre las cosas del blogger, poner una encuesta sobre si al que me lee le gustaría conocerme. Aunque el voto es anónimo, sospecho quién ha podido votar. Os puedo decir también que yo votaría también que sí en conocer a los autores de los blogs que leo. Estoy descubriendo que esto de los blogs, son una estupenda forma de encontrar personas con pensamientos que nos gusta compartir, escuchar, pensemos o no igual, pero que nos abren un abanico de posibilidades para poder ver la realida desde otro punto de vista. Qué coño, hacer amigos. El otro día me imaginaba a alguien que me paraba por la calle, me llamaba por mi nombre y me preguntaba que qué tal estaba. Podría ser alguien que me lee, que nunca se ha presentado pero, por lo que sea, le gustaba lo que ponía y se sentía cercano a mi por simpatía de pensamiento. Me pregunto cual sería mi reacción, si de miedo porque pudiera ser un asesino en serie o de agradable sorpresa pero con desconfianza. Imagino que si no se hubiera presentado en el blog, sólo me leyera,mi reacción sería de desconfianza, y de alegría si fuera, por ejemplo, Tiatan. En fin, ya me gustaría encontrarme con ella por casualidad por la calle y ser yo quien la reconociera a ella antes que ella a mi. Sólo por ver la cara que pondría. Lo que no sé si me atrevería a saludar. Al fin y al cabo uno es extrovertido de palabra, pero tímido en realidad.
Bueno, un buen finde a todos. (y a santificarse esta semana)
jueves, 13 de marzo de 2008
Picando piedra
Hoy mientras comía, había dos chicas (33-38 años aprox) en frente de mi. Me pareció curioso que las dos tenían unos ojos muy bonitos, una menos que la otra, con menos vida. Y las dos perdían mucho de perfil. Sí, ya sé que este tipo de comentarios no es muy acertado, sobre todo delante de mujeres, que con los susceptibles que son, seguro que les hago recordar lo que ellas consideran defectos, que si una anriz grande, un mentón saliente...
Lo que importa no es la apariencia externa. A ver cuando os lo meteis en la cabeza. Es lo de dentro de lo que os tendríais que preocupar. Ya dicen que los ojos son el espejo del alma. Los ojos pueden llegar a decir mucho de una persona. Por eso me gusta fijarme en ellos, para ver qué me dicen. Y los de la chica que tenía los ojos llenos de vida me entretuvieron la comida.
Ayer fui a comer con mi amiga de Burgos. De camino, en el metro, había una chica medio mora con unos ojos negros impresionantes. Para los tikismikis lo dejaremos en oscuros, pues no existen los ojos negros. Y ayer, que tenía el día alegre, me fijé, que mientras yo iba radiante de felicidad, la gente el metro iba muy apagada, con desgana. Yo creo que si les dábamos una pistola se quitaban esa vida arrastrada de un tiro. Y claro, pensaba, es que ellos no han contemplado hoy cómo amanecía un sol en el horizonte, entre el cielo y el mar. No es que me alegre de que la humanidad del metro tenga esa desgana, pero doy gracias a Dios por permitirme contemplar el mar todas las mañanas, pues me ayuda a tener una sonrisa y ganas de vivir el día (aunque muchas veces sepa los problemas que me va a deparar).
Hay una historia corta que me medioinventaré, porque no recuerdo mucho. La leí en unos panfletos de los Misioneros de Marianhill, o incluso en su revista, que llega a casa de mis padres sin falta desde que me metí a catequista en mi parroquia (hace años ya de eso, cómo pasa el tiempo). Seguro que cuando llegue a casa tendré un número esperándome.
Esto era un príncipe que había mandado hacer una catedral y decidió hacerse pasar por un trabajador másy un día pasó por la cantera donde se picaba la roca. Allí se tallaba y se esculpían las piedras que iban, todas juntas, a formar una catedral, cada una con sus forma y su tamaño, destinada a formar una parte del arco, del pilar, etc. Y se encontró con tres hombres. El primero de ellos no dejaba de jurar y maldecir a cada golpe de roca. El príncipe le preguntó:-"¿Por qué estas tan malhumorado?. y el hombre le respondío: -"Pues porque he nacido pobre y la mierda de vida que me ha tocado vivir es esta. Aquí me ves, picando piedra y sudando para seguir malviviendo". El príncipe siguió caminando y se encontró con un segundo hombre: -"¿Qué tal estás?"-le preguntó-"pues aquí ando, picando piedra, no es un trabajo que me guste, pero me pagan por hacerlo, por lo que entiendo que no me puedo quejar". El príncipe siguió andando y se encontró con un tercer hombre que con una gran sonrisa picaba mejor que los otros dos, desprendiendo un entusiamo que no había visto en los otros trabajadores. El príncipe, intrigado por esta alegría no propia de un hombre que trabajaba en un trabajo tan duro como aquél, le inquiere: "Buenos días, buen hombre. ¿Le importaría decirme por qué está usted tan contento?".
Y el hombre, se vuelve al príncipe con una gran sonrisa y le contesta: "¿Es que no lo ve? ¡Estoy construyendo una catedral!"
Tras este cuentecín habría que preguntarse a qué tipo de personas pertenecemos cada uno, si al primero, un hombre que se queja constantemente e la vida que le ha tocado vivir; al segundo, un hombre que no se queja pero que tampoco se alegra, que es demasiado conformista y prefiere no meterse en líos por mejorar su situación o la de los demás. Y el tercero, con quién me identifico yo, que pone ilusión en todo lo que hace y le da ese toque personal a la piedra para que quede constancia de su paso por esta vida. Así que ¿picais piedra o construís una catedral?
Lo que importa no es la apariencia externa. A ver cuando os lo meteis en la cabeza. Es lo de dentro de lo que os tendríais que preocupar. Ya dicen que los ojos son el espejo del alma. Los ojos pueden llegar a decir mucho de una persona. Por eso me gusta fijarme en ellos, para ver qué me dicen. Y los de la chica que tenía los ojos llenos de vida me entretuvieron la comida.
Ayer fui a comer con mi amiga de Burgos. De camino, en el metro, había una chica medio mora con unos ojos negros impresionantes. Para los tikismikis lo dejaremos en oscuros, pues no existen los ojos negros. Y ayer, que tenía el día alegre, me fijé, que mientras yo iba radiante de felicidad, la gente el metro iba muy apagada, con desgana. Yo creo que si les dábamos una pistola se quitaban esa vida arrastrada de un tiro. Y claro, pensaba, es que ellos no han contemplado hoy cómo amanecía un sol en el horizonte, entre el cielo y el mar. No es que me alegre de que la humanidad del metro tenga esa desgana, pero doy gracias a Dios por permitirme contemplar el mar todas las mañanas, pues me ayuda a tener una sonrisa y ganas de vivir el día (aunque muchas veces sepa los problemas que me va a deparar).
Hay una historia corta que me medioinventaré, porque no recuerdo mucho. La leí en unos panfletos de los Misioneros de Marianhill, o incluso en su revista, que llega a casa de mis padres sin falta desde que me metí a catequista en mi parroquia (hace años ya de eso, cómo pasa el tiempo). Seguro que cuando llegue a casa tendré un número esperándome.
Esto era un príncipe que había mandado hacer una catedral y decidió hacerse pasar por un trabajador másy un día pasó por la cantera donde se picaba la roca. Allí se tallaba y se esculpían las piedras que iban, todas juntas, a formar una catedral, cada una con sus forma y su tamaño, destinada a formar una parte del arco, del pilar, etc. Y se encontró con tres hombres. El primero de ellos no dejaba de jurar y maldecir a cada golpe de roca. El príncipe le preguntó:-"¿Por qué estas tan malhumorado?. y el hombre le respondío: -"Pues porque he nacido pobre y la mierda de vida que me ha tocado vivir es esta. Aquí me ves, picando piedra y sudando para seguir malviviendo". El príncipe siguió caminando y se encontró con un segundo hombre: -"¿Qué tal estás?"-le preguntó-"pues aquí ando, picando piedra, no es un trabajo que me guste, pero me pagan por hacerlo, por lo que entiendo que no me puedo quejar". El príncipe siguió andando y se encontró con un tercer hombre que con una gran sonrisa picaba mejor que los otros dos, desprendiendo un entusiamo que no había visto en los otros trabajadores. El príncipe, intrigado por esta alegría no propia de un hombre que trabajaba en un trabajo tan duro como aquél, le inquiere: "Buenos días, buen hombre. ¿Le importaría decirme por qué está usted tan contento?".
Y el hombre, se vuelve al príncipe con una gran sonrisa y le contesta: "¿Es que no lo ve? ¡Estoy construyendo una catedral!"
Tras este cuentecín habría que preguntarse a qué tipo de personas pertenecemos cada uno, si al primero, un hombre que se queja constantemente e la vida que le ha tocado vivir; al segundo, un hombre que no se queja pero que tampoco se alegra, que es demasiado conformista y prefiere no meterse en líos por mejorar su situación o la de los demás. Y el tercero, con quién me identifico yo, que pone ilusión en todo lo que hace y le da ese toque personal a la piedra para que quede constancia de su paso por esta vida. Así que ¿picais piedra o construís una catedral?
Como si fuera Jueves Santo
Hoy no es jueves santo, aún. Y como voy a faltar en el blog la próxima semana... Venía oyendo por la radio la nueva campaña de tráfico, que si no cojas horas punta, que si te programes la ruta, que si lleves comida, que si tal y pascual… con la moralina "que no pueda contigo la semana santa" o algo así. Esto siempre me hace pensar en lo mismo. Aunque estoy de acuerdo en que las personas son libres de destinar su tiempo libre para lo que quieran, ir a la montaña, a la playa, perderse por ahí o, simplemente, pasar unos días relajados en casa para coger fuerzas a la vuelta al trabajo, yo, me propuse una vez no dejar pasar una semana santa sin acordarme de la Pasión y de la Muerte de nuestro Señor Jesucristo (aquí podeis dejar de leer los que no estais preparados para temas religiosos, de iglesia, que un menda lerenda no va a poder evitar contar, sobe todo para que no os aburrais). Y experimentar, por supuesto, la Resurrección, hecho por el cual existe mi Fe, o Fe. Y aunque ahora no hago todo lo que os voy a relatar, me lo tomo más "light", asisto a los oficios del jueves, del viernes y a la fiesta más importante de nuestro año litúrgico, la Vigilia Pascual donde se celebra la Resurreción de Jesús.
Cuando era más joven, en mi etapa de 17-26 años, en mi parroquia de Salamanca había muchos jóvenes con alguna que otra inquietud con este tema de Jesús de Nazaret. Por Semana Santa, celebrábamos la Pascua en la parroquia. Nos "encerrábamos" desde el miércoles por la noche o el mismo jueves por la mañana para pasar la Pascua juntos. El jueves santo es el día del Amor Fraterno. Por la mañana, a eso de las nueve, nos levantábamos de nuestro saco de dormir (habilitábamos los locales de catequesis como cuartel neurálgico y dormitorios) y rezábamos laudes. Laudes que rezaban todos los cristianos del mundo en ese mismo momento, con sus antífonas, a coros, etc. En un principio, quizá es lo más rollo, pues son lecturas del antiguo testamento, con un tipo de rezo que nunca ha sido de mi predilección, demasiado serio. Tras ratos de silencio alguno repetía aquella frase que le había calado, etc. Viene bien para saber lo que es y como se reza unos laudes, pero prefiero evitarlos. Mis rezos van más en la línea de San Francisco de Asís, con los pajaritos, el campo, el mar, etc. Vamos, disfrutando todo aquello que se nos ha regalado y dando gracias a Dios como cuando se le reza antes de comer (je, je, es mentira, no suelo rezar antes de comer, que malo me siento, je, je).
A lo que iba, por la mañana se solía destinar a algún tipo de actividad que nos recordara el día en el que estábamos. Se solía dividr la gente. Algunos íbamos a una residencia de ancianos donde solíamos ir todos los años apra reirnos con los viejillos, que son unos cachondos que no veais. También los había amargados, pero bueno. Otras veces íbamos a un hospital donde ayudábamos a las enfermeras a darles de comer. Hay que decir que nos preferíana nosotros que a las enfermeras. Esta actividades hizo que más de uno aumentara este tipo de frecuencia de visitas a lo largo del año. Y otros (esto lo odiaba cuando me tocaba) les tocaba ir a repartir la comunión a enfermos. Aquí voy a hacer un poco de hincapié porque, pese a que no me gustaba, estas personas que dadas sus circunstancias no podían salir de casa, me tenían fascinado. No eran la típica abuelilla de mantilla negra y superreligosa o fanática de tal virgen o tal santo. A veces era un hombre de 45-50 años o una mujer, que tenían "avidez" por tomar la comunión. Tras una breve ceremonia de 5 min si llegaba, nos quedábamos un rato charlando. Me fascinaba el tener el "poder" (dame tu fuerza pegaso, como decían los caballeros del zodíaco) de poder administrar la comunión.También me sentía un mindundi. El señor o señora se sorprendía de que unos chavales como nosotros, que sin ir para curas o para monjas (a veces pensaban que eramos pareja cunado íbamos chica y chico nada más), se dedicaran a estos menesteres. Y observábamos que normalmente los familiares con los que convivían, formaban el prototipo de familia religiosa y en casa hacían patente su creencia. En mi casa el tema Dios siempre ha sido tabú. Ni se habla de Dios ni se habla de sexo. Y no es que anhele pertenecer a una de estas familias, estoy contento con la mía, donde somos bastante despegados. Pero me daba curiosidad.
Después de comer todos junto, la tarde tenía su rato de oración, oracíon con dinámicas de grupo para hacerlas entretenidas y mejorar la comprensión de los días de pascua que estábamos compartiendo. Se preparaban los oficios que se celebrarían con toda la comunidad, el lavatorio de pies, la última cena y la hora santa. Según el año, hubo quien enfocaba las dinámicas desde un sentido que nunca me ha gustado. Cuando nos juntábamos tana gente, siempre había personas que no se llevaban bien con otras. Uno que haya estado en una parroquia sabrá d elo que le hablo. Cuando te metes en el mundo parroquial, te das cuenta de los intereses (a mi modo de ver "ficticios") que se crean y que el espíritu santo no campa a sus anchas si no que está encerrado en una jaula. Y piensas, si en la parroquia hay gente así, no me extraña que el mundo ande como anda. En fin, que hay muchos trapos sucios y piques entre las personas. A lo que iba, el lavatorio de pies particular consistía en lavar los pies a aquél que te caía como una patada en el culo, o que creías que no habías sido fiel o habías hecho algo que no le gustara. bien apra significar que implorabas su perdón, bien para decirle a trave´s de este gesto que te ponías a su disposición o que contara con tu amistad. Lo curioso de esta actividad es que igual te lavaba los pies la persona que menos te lo esperabas, y te quedabas pensando que qué cojones te habría hecho para que te lavara los pies. O igual habías sido tú quien había hecho algo que le hubiera molestado y el te lavaba los pies como diciendo que no te guardaba rencor. Y claro, sólo podías saberlo preguntándoles después, y si te lo decía bien, y si no, te quedabas con la incógnita.
También había ratillos de esparcimiento, no todo iba a ser reflexión y oración. Lo más pesado era la hora santa. Imagino que tan pesaddo como lo fue en realidad, cunado los discípulos se quedaron dormidos en la noche en que Jesús sería apresado para matarlo. Y mañana, el vienes santo.
Cuando era más joven, en mi etapa de 17-26 años, en mi parroquia de Salamanca había muchos jóvenes con alguna que otra inquietud con este tema de Jesús de Nazaret. Por Semana Santa, celebrábamos la Pascua en la parroquia. Nos "encerrábamos" desde el miércoles por la noche o el mismo jueves por la mañana para pasar la Pascua juntos. El jueves santo es el día del Amor Fraterno. Por la mañana, a eso de las nueve, nos levantábamos de nuestro saco de dormir (habilitábamos los locales de catequesis como cuartel neurálgico y dormitorios) y rezábamos laudes. Laudes que rezaban todos los cristianos del mundo en ese mismo momento, con sus antífonas, a coros, etc. En un principio, quizá es lo más rollo, pues son lecturas del antiguo testamento, con un tipo de rezo que nunca ha sido de mi predilección, demasiado serio. Tras ratos de silencio alguno repetía aquella frase que le había calado, etc. Viene bien para saber lo que es y como se reza unos laudes, pero prefiero evitarlos. Mis rezos van más en la línea de San Francisco de Asís, con los pajaritos, el campo, el mar, etc. Vamos, disfrutando todo aquello que se nos ha regalado y dando gracias a Dios como cuando se le reza antes de comer (je, je, es mentira, no suelo rezar antes de comer, que malo me siento, je, je).
A lo que iba, por la mañana se solía destinar a algún tipo de actividad que nos recordara el día en el que estábamos. Se solía dividr la gente. Algunos íbamos a una residencia de ancianos donde solíamos ir todos los años apra reirnos con los viejillos, que son unos cachondos que no veais. También los había amargados, pero bueno. Otras veces íbamos a un hospital donde ayudábamos a las enfermeras a darles de comer. Hay que decir que nos preferíana nosotros que a las enfermeras. Esta actividades hizo que más de uno aumentara este tipo de frecuencia de visitas a lo largo del año. Y otros (esto lo odiaba cuando me tocaba) les tocaba ir a repartir la comunión a enfermos. Aquí voy a hacer un poco de hincapié porque, pese a que no me gustaba, estas personas que dadas sus circunstancias no podían salir de casa, me tenían fascinado. No eran la típica abuelilla de mantilla negra y superreligosa o fanática de tal virgen o tal santo. A veces era un hombre de 45-50 años o una mujer, que tenían "avidez" por tomar la comunión. Tras una breve ceremonia de 5 min si llegaba, nos quedábamos un rato charlando. Me fascinaba el tener el "poder" (dame tu fuerza pegaso, como decían los caballeros del zodíaco) de poder administrar la comunión.También me sentía un mindundi. El señor o señora se sorprendía de que unos chavales como nosotros, que sin ir para curas o para monjas (a veces pensaban que eramos pareja cunado íbamos chica y chico nada más), se dedicaran a estos menesteres. Y observábamos que normalmente los familiares con los que convivían, formaban el prototipo de familia religiosa y en casa hacían patente su creencia. En mi casa el tema Dios siempre ha sido tabú. Ni se habla de Dios ni se habla de sexo. Y no es que anhele pertenecer a una de estas familias, estoy contento con la mía, donde somos bastante despegados. Pero me daba curiosidad.
Después de comer todos junto, la tarde tenía su rato de oración, oracíon con dinámicas de grupo para hacerlas entretenidas y mejorar la comprensión de los días de pascua que estábamos compartiendo. Se preparaban los oficios que se celebrarían con toda la comunidad, el lavatorio de pies, la última cena y la hora santa. Según el año, hubo quien enfocaba las dinámicas desde un sentido que nunca me ha gustado. Cuando nos juntábamos tana gente, siempre había personas que no se llevaban bien con otras. Uno que haya estado en una parroquia sabrá d elo que le hablo. Cuando te metes en el mundo parroquial, te das cuenta de los intereses (a mi modo de ver "ficticios") que se crean y que el espíritu santo no campa a sus anchas si no que está encerrado en una jaula. Y piensas, si en la parroquia hay gente así, no me extraña que el mundo ande como anda. En fin, que hay muchos trapos sucios y piques entre las personas. A lo que iba, el lavatorio de pies particular consistía en lavar los pies a aquél que te caía como una patada en el culo, o que creías que no habías sido fiel o habías hecho algo que no le gustara. bien apra significar que implorabas su perdón, bien para decirle a trave´s de este gesto que te ponías a su disposición o que contara con tu amistad. Lo curioso de esta actividad es que igual te lavaba los pies la persona que menos te lo esperabas, y te quedabas pensando que qué cojones te habría hecho para que te lavara los pies. O igual habías sido tú quien había hecho algo que le hubiera molestado y el te lavaba los pies como diciendo que no te guardaba rencor. Y claro, sólo podías saberlo preguntándoles después, y si te lo decía bien, y si no, te quedabas con la incógnita.
También había ratillos de esparcimiento, no todo iba a ser reflexión y oración. Lo más pesado era la hora santa. Imagino que tan pesaddo como lo fue en realidad, cunado los discípulos se quedaron dormidos en la noche en que Jesús sería apresado para matarlo. Y mañana, el vienes santo.
miércoles, 12 de marzo de 2008
Basta una cebolla para salvar el mundo.
Como no voy a poder escribir la semana que viene y me ha venido ahora una historia que siempre me ha gustado (a raíz de leer la historia de Mery sobre la felicidad) , que contaba José Luis Martín Descalzo en su libro "Razones para vivir", de todas sus razones, el que más me gusta. A ver si en Salamanca, en un santo lugar (una tienda de libros religiosos llamada ARTS), tienen el libro de Razones (donde vienen recopilados todos sus "raoznes para..." y si vale menos de 35 €, me lo compro. En Agapea.com vale 35 € y con gastos de envío se queda en 40 €.
Ahora que estamos entrando en días santos, de redención por la muerte y de resurreción, la historia empieza más o menos así (la voy a contar medio inventada, pues la lei hace más de 10 años):
Cuentan las viejas crónicas ortodoxas (del principio nunca me olvidé, porque siempre me pareció molón, haciendo interesarse por lo que se va a contar) que hubo una señora que en vida fue siempre muy antipática, nunca hizo nada por nadie. Tacaña y huraña. En esto que se muere y fue a parar a una gran olla donde pasaría la eternidad con el resto de almas en pena en una cocción de eterno sufrimiento. Su ángel de la guarda, que tuvo que pasar vegüenza cuando pasó delante de Dios al haber permitido que su protegida fuera así de desconsiderada con los demás en vida, al ver a su "protegida" en tal sufrimiento, ejerciendo con celo su trabajo, no podía soportar tal final para la mujer. Sacando fuerzas de flaqueza, aún pensando que ya nada podía hacer, se volvió hacia Dios y abogando por ella, le pidió otra oportunidad para la mujer. Dios, en su eterna bondad, le contestó al buen ángel de la guarda que ya era tarde, que mientras ella vivía, tuvo libertad para cambiar y aspirar a otra vida, pero que no lo hizo, y que pese a que el ángel estuvo a su lado toda su vida, procurando que la mujer no tomara decisiones erróneas, cual conciencia pesada, la mujer prefirió actuar con avaricia y maldad despreciando al prójimo y pensando sólo en ella misma. Pero tanto insistió el ángel de la guarda (quien tuviera un ángel como este, je, je) que Dios, conmovido, le dió otra oportunidad y le dijo al ángel: "vuelve a la Tierra y mira en toda la vida de la mujer. Si encuentras algo que ella haya echo bueno, me lo traes y ya veremos".
El ángel, entusiasmado, raudo y velóz voló por todos los años que vivió la mujer. Revoloteaba una y otra vez sin encontrar nada. Cuando estuvo a punto de desistir, hayó un día en que un pobre llamó a la puerta de esta señora y, en su mala leche, la señora le dió al pobre una cebolla (en lugar de un buen bocata de jamón) paar reirse de él. El ángel cogió la cebolla y se fue corriendo ante Dios (o volando, como queráis). Dios, al ver la cebolla, le dijo al ángel: - "Está bien. Coge la cebolla y ve donde la mujer. Si agarrándose a la cebolla consigues sacarla de allí, será salvada".
El ángel, contento, fue volando donde estaba la mujer y le gritó:- "mujer, agárrate a la cebolla y te sacaré de aquí". La mujer, como huyendo del diablo, se agarró presta a un extremo de la cebolla. Y el ángel empezó a tirar, a tirar y a tirar. Iba con mucho cuidado porque tenía miedo de que esta se rompiera. Al poco, la mujer empezó a salir. Iba saliendo muy poco a poco a los tremendos esfuerzos del ángel. Cuando ya iba por la cintura, el resto de almas, que vieron que ella estaba saliendo de allí, como también vieron que había una posibilidad de salvarse se agarraron a la mujer. Y el ángel, con todo el peso de las almas iba sacando a la mujer y al resto de las almas, que se agarraban con fuerza a la mujer. La mujer, cuando vió que al ángel cada vez le costaba más y, por miedo a que se rompiera la cebolla, empezó a dar patadas a las otras almas para que se soltaran de ella. Tanto forcejeó que, al final, la cebolla se rompió y se quedó con el resto de las almas a sufrir para toda la eternidad.
Esta historia tiene muchas moralejas. Si la mujer no hubiera querido salvarse ella sola, ese acto de bondad, hubiera servido para salvar a la humanidad entera. Este cuento no pretende decir que hay que portarse bien para no ir al infierno. no van por ahí los tiros. Lo que pretende decir es que nuestras buenas acciones merecen la pena. Ante tanta avaria, envidias y demás malas artes, nuestro buen ahcer, nuestro sentido del humor, nuestra sonrisa, iluminarán allá donde vayamos y contagiaran a los demás salvando el mundo. (Qué utópica suena eso). Y eso esto amigos.
Una interpretación más infantil es que, cojones, no se lo hagamos tan difícil al ángel de la guarda, leche, encima que está ahí, protegiéndonos. Ja, ja, ja.
Ahora que estamos entrando en días santos, de redención por la muerte y de resurreción, la historia empieza más o menos así (la voy a contar medio inventada, pues la lei hace más de 10 años):
Cuentan las viejas crónicas ortodoxas (del principio nunca me olvidé, porque siempre me pareció molón, haciendo interesarse por lo que se va a contar) que hubo una señora que en vida fue siempre muy antipática, nunca hizo nada por nadie. Tacaña y huraña. En esto que se muere y fue a parar a una gran olla donde pasaría la eternidad con el resto de almas en pena en una cocción de eterno sufrimiento. Su ángel de la guarda, que tuvo que pasar vegüenza cuando pasó delante de Dios al haber permitido que su protegida fuera así de desconsiderada con los demás en vida, al ver a su "protegida" en tal sufrimiento, ejerciendo con celo su trabajo, no podía soportar tal final para la mujer. Sacando fuerzas de flaqueza, aún pensando que ya nada podía hacer, se volvió hacia Dios y abogando por ella, le pidió otra oportunidad para la mujer. Dios, en su eterna bondad, le contestó al buen ángel de la guarda que ya era tarde, que mientras ella vivía, tuvo libertad para cambiar y aspirar a otra vida, pero que no lo hizo, y que pese a que el ángel estuvo a su lado toda su vida, procurando que la mujer no tomara decisiones erróneas, cual conciencia pesada, la mujer prefirió actuar con avaricia y maldad despreciando al prójimo y pensando sólo en ella misma. Pero tanto insistió el ángel de la guarda (quien tuviera un ángel como este, je, je) que Dios, conmovido, le dió otra oportunidad y le dijo al ángel: "vuelve a la Tierra y mira en toda la vida de la mujer. Si encuentras algo que ella haya echo bueno, me lo traes y ya veremos".
El ángel, entusiasmado, raudo y velóz voló por todos los años que vivió la mujer. Revoloteaba una y otra vez sin encontrar nada. Cuando estuvo a punto de desistir, hayó un día en que un pobre llamó a la puerta de esta señora y, en su mala leche, la señora le dió al pobre una cebolla (en lugar de un buen bocata de jamón) paar reirse de él. El ángel cogió la cebolla y se fue corriendo ante Dios (o volando, como queráis). Dios, al ver la cebolla, le dijo al ángel: - "Está bien. Coge la cebolla y ve donde la mujer. Si agarrándose a la cebolla consigues sacarla de allí, será salvada".
El ángel, contento, fue volando donde estaba la mujer y le gritó:- "mujer, agárrate a la cebolla y te sacaré de aquí". La mujer, como huyendo del diablo, se agarró presta a un extremo de la cebolla. Y el ángel empezó a tirar, a tirar y a tirar. Iba con mucho cuidado porque tenía miedo de que esta se rompiera. Al poco, la mujer empezó a salir. Iba saliendo muy poco a poco a los tremendos esfuerzos del ángel. Cuando ya iba por la cintura, el resto de almas, que vieron que ella estaba saliendo de allí, como también vieron que había una posibilidad de salvarse se agarraron a la mujer. Y el ángel, con todo el peso de las almas iba sacando a la mujer y al resto de las almas, que se agarraban con fuerza a la mujer. La mujer, cuando vió que al ángel cada vez le costaba más y, por miedo a que se rompiera la cebolla, empezó a dar patadas a las otras almas para que se soltaran de ella. Tanto forcejeó que, al final, la cebolla se rompió y se quedó con el resto de las almas a sufrir para toda la eternidad.
Esta historia tiene muchas moralejas. Si la mujer no hubiera querido salvarse ella sola, ese acto de bondad, hubiera servido para salvar a la humanidad entera. Este cuento no pretende decir que hay que portarse bien para no ir al infierno. no van por ahí los tiros. Lo que pretende decir es que nuestras buenas acciones merecen la pena. Ante tanta avaria, envidias y demás malas artes, nuestro buen ahcer, nuestro sentido del humor, nuestra sonrisa, iluminarán allá donde vayamos y contagiaran a los demás salvando el mundo. (Qué utópica suena eso). Y eso esto amigos.
Una interpretación más infantil es que, cojones, no se lo hagamos tan difícil al ángel de la guarda, leche, encima que está ahí, protegiéndonos. Ja, ja, ja.
La verdad os hará libres.
¡Cómo me gusta esta fresa (iba a decir), esta frase! En un día como hoy, el día internacional de la Libertad de expresión en internet. Es grande eso de sentirse libre. Tener autonomía para decidir qué camino seguir, equivocarse, volver atrás caundo se pueda o apechugar con la decisión tomada. Ese Señor nos dió la libertad de elección, de creer o no, de seguirle o no. Lo bueno es que siempre estará ahí, con los brazos abiertos.
Hoy ha amanecido un día más con un dibujo bonito en el cielo. Me levanta el humor contemplar todas las mañanas como amanece en el horizonte que se ve desde el balcón del Mediterráneo de Tarragona. Aunque hoy no he sacado fotos, os puedo asegurar que, pese haber más nubes que ayer, sus formas y colores dados por un sol que nace, infunden unas ganas de vivir el día de hoy mejor que el de ayer. Pensar que se nos ha regalado un día más para vivir nos tendría que hacer saltar de gozo. Ja, ja, ja. El cura de mi parroquia de Salamanca utiliza mucho la palabra gozo y siempre me ha hecho mucha gracia, o debería de cir que no me gusta nada, por sus connotaciones religiosas, que dan pie a la mofa, como la canción "yo tengo un gozo en el alma...".
También estoy animado porque me voy de vacaciones la semana que viene, por lo que desde el viernes no sabréis de mi hasta el próximo 25 de marzo por la tarde, pues no veré un ordenador hasta entonces.
Dos amigas mías de Burgos van a compartir este finde en Valencia, una de ellas lleva allí unos 2 años ya y nos ha invitado a ir. Yo no puedo porque ya me toca cortarme el pelo, que parezco un gitano (con perdón de los gitanos, es que su look no termina de gustarme). Igual coincidis por allí Tíatan y no lo sabeis, al estilo de una pelicula costumbrista española donde se entrecruzan los personajes de diferentes historias sin saberlo.
Me dijo mi jefe ahora mismo que nos han dado la obra de Flix. Ya sabía yo que mi visita de hace dos domingos no iba a ser en vano. Autostrike, entonces (autopalmada en la espalda, para los que no saben inglés).
Un buen día para todos. En la foto salen tres amigas que estarán este finde en Valencia. La foto fue tomada en Salamanca. Un poco borrosa, qué le vamos a hacer.
martes, 11 de marzo de 2008
Si no creeis, moriréis por vuestros pecados
Esta frase resumen de la elctura de hoy puede ser desafortunada con la noticia de los nuevos pecados capitales publicados por el Vaticano. Que si no reciclas basura irás al infierno (el infierno que sería vivir rodeados de basura), que si te drogas irás al infierno (es un infierno andar metido en el mundo de las drogas, del que es difícil salir), y así podríamos seguir. A veces uno siente vergüenza de ser cristiano. Como si pretendieran educarnos a través del miedo al infierno. Aunque sus intenciones sean buenas (pensemos que es así), se equivocan con estas gilipolleces.
En fin, la lectura de hoy nos habla de un Señor que se pone metafísico y difícil para los que no quieren creer en él, haciendo más inalcanzable el creer. Me acuerdo que teníamos una canción donde en algunas hojas de canciones, la palabra creer venía con errata y ponía querer, y mientras unos cantaban "creer" otros decían "querer". Algo así como los anuncios de Caja Madrid, que si vas al supermercado y ves puerros, puerros - puerres, si quieres puerros, si quieres puedes. Se mezclan las palabras. Pero en cuanto al Evangelio, muchas veces para creer hay que querer, al igual que para querer hay que creer. todo según las circunstancias. Imaginad a ese Señor, de pueblo en pueblo, obrando milagros para aquellos que las palabras bonitas sólo no bastan. Dando de comer a los que le siguen, porque un estómago vacío nunca podrá creer en nada más que en alimentarse... Y aún con sus hechos, vienen otros que le intentan matar porque les quita el negocio. Y sigue siendo un mal de nuestros días pretender hacer negocio con el mensaje de aquél Señor. Y seguimos con la misma intención que aquellos que le querían mal, seguimos queriendo matarle. Nos da miedo Alguien que nos enseña nuestras miserias para que podamos desprendernos de ellas. Nos asusta ser miserables. Joder, como suena, no quería decir eso exactamente. Lo importante es mirar a Dios a la cara (mirarse a uno mismo) y cambiar lo que no nos gusta, resucitar con él en una persona nueva que quiere ser feliz, que quiere amar, que quiere que le quieran. Y a los que no quieran resucitar con él, que "resuciten" ellos, si al final todos estaremos calvos. Estoy convencido de que aquellos que desparraman bien a su alrededor y alegría, aunque no crean en Dios, están más cerca de Él de lo que alguno que queremos creer y nos olvidamos de lo importante, vivir y hacer la vida agradable a nuestro alrededor.
Vaya rollo que os he soltado. Parezco un curilla frustrado. Si yo creo que iba para cura, pero no comulgo con eso del celibato, que me tiran más dos tetas que dos carretas.
El otro día, oyendo la radio, hablaban de que los niños que manejaban más de un idioma, tenían mejor capacidad o más facilidad para aprender distintas materias que los que sólo hablaban uno. También decían que al final, era bueno la diversidad de idiomas. Esto me dejó pensativo. No quiero negar lo que decían ni tampoco mostrar mi desacuerdo, porque no lo sé. Pero pensando en la historia de la torre de babel me surgían una serie de preguntas. Si el hombre, en su afán de llegar a Dios por caminos tontos, (a quien se le ocurre, si Dios está en cada uno, o eso dicen), se propone construir una torre, no sé si para llegar a Dios o para demostrar que son más que Dios. Y Dios, para restregarles su vanidad, les divide el lenguaje en una serie de idiomas, lo que provoca que no se entiendan los trabajadores y la bora sea una ruina. Este cuento es bastante claro, personas que no se entienden, difícilmente llevarán a cabo un proyecto juntos. Si todos estamos de acuerdo en esta premisa, ¿por qué decimos que lso idiomas son buenos? ¿No sería mejor que todos habláramos un mismo idioma? ¿No se evitarían así malentendidos? No quiero entrar al debate más que gastado de si catalán, vasco o castellano, no digo eso, pero parece lógico pensar que un idioma común sería ideal desde el punto de vista del entendimiento.
Esto viene a ser como cuando nos encontramos un trozo de columna romana o una vasija, y lo pretenemos conservar como oro en paño, por su valía arqueológica. Si un señor de esa época viajara en el tiempo a nuestros días y se encuentra unas ruinas de su época, valladas y con visitas guiadas, seguro que se preguntaría que si estamos locos. ¿No veis que eso es una ruina? ¿Por qué no termináis de tirarlo y haceís una construcción nueva? Sería como un galo diciendo "están locos estos romanos".
son tonterías que alguna vez se me han ocurrido. Al final, todas las cosas, según quién las mire tienen más o menos importancia. Por lo tanto, la moraleja es: No os enfadeis por tonterías. No discutais por ideas. (Me tendré que aplicar el cuento) Sed felices.
En fin, la lectura de hoy nos habla de un Señor que se pone metafísico y difícil para los que no quieren creer en él, haciendo más inalcanzable el creer. Me acuerdo que teníamos una canción donde en algunas hojas de canciones, la palabra creer venía con errata y ponía querer, y mientras unos cantaban "creer" otros decían "querer". Algo así como los anuncios de Caja Madrid, que si vas al supermercado y ves puerros, puerros - puerres, si quieres puerros, si quieres puedes. Se mezclan las palabras. Pero en cuanto al Evangelio, muchas veces para creer hay que querer, al igual que para querer hay que creer. todo según las circunstancias. Imaginad a ese Señor, de pueblo en pueblo, obrando milagros para aquellos que las palabras bonitas sólo no bastan. Dando de comer a los que le siguen, porque un estómago vacío nunca podrá creer en nada más que en alimentarse... Y aún con sus hechos, vienen otros que le intentan matar porque les quita el negocio. Y sigue siendo un mal de nuestros días pretender hacer negocio con el mensaje de aquél Señor. Y seguimos con la misma intención que aquellos que le querían mal, seguimos queriendo matarle. Nos da miedo Alguien que nos enseña nuestras miserias para que podamos desprendernos de ellas. Nos asusta ser miserables. Joder, como suena, no quería decir eso exactamente. Lo importante es mirar a Dios a la cara (mirarse a uno mismo) y cambiar lo que no nos gusta, resucitar con él en una persona nueva que quiere ser feliz, que quiere amar, que quiere que le quieran. Y a los que no quieran resucitar con él, que "resuciten" ellos, si al final todos estaremos calvos. Estoy convencido de que aquellos que desparraman bien a su alrededor y alegría, aunque no crean en Dios, están más cerca de Él de lo que alguno que queremos creer y nos olvidamos de lo importante, vivir y hacer la vida agradable a nuestro alrededor.
Vaya rollo que os he soltado. Parezco un curilla frustrado. Si yo creo que iba para cura, pero no comulgo con eso del celibato, que me tiran más dos tetas que dos carretas.
El otro día, oyendo la radio, hablaban de que los niños que manejaban más de un idioma, tenían mejor capacidad o más facilidad para aprender distintas materias que los que sólo hablaban uno. También decían que al final, era bueno la diversidad de idiomas. Esto me dejó pensativo. No quiero negar lo que decían ni tampoco mostrar mi desacuerdo, porque no lo sé. Pero pensando en la historia de la torre de babel me surgían una serie de preguntas. Si el hombre, en su afán de llegar a Dios por caminos tontos, (a quien se le ocurre, si Dios está en cada uno, o eso dicen), se propone construir una torre, no sé si para llegar a Dios o para demostrar que son más que Dios. Y Dios, para restregarles su vanidad, les divide el lenguaje en una serie de idiomas, lo que provoca que no se entiendan los trabajadores y la bora sea una ruina. Este cuento es bastante claro, personas que no se entienden, difícilmente llevarán a cabo un proyecto juntos. Si todos estamos de acuerdo en esta premisa, ¿por qué decimos que lso idiomas son buenos? ¿No sería mejor que todos habláramos un mismo idioma? ¿No se evitarían así malentendidos? No quiero entrar al debate más que gastado de si catalán, vasco o castellano, no digo eso, pero parece lógico pensar que un idioma común sería ideal desde el punto de vista del entendimiento.
Esto viene a ser como cuando nos encontramos un trozo de columna romana o una vasija, y lo pretenemos conservar como oro en paño, por su valía arqueológica. Si un señor de esa época viajara en el tiempo a nuestros días y se encuentra unas ruinas de su época, valladas y con visitas guiadas, seguro que se preguntaría que si estamos locos. ¿No veis que eso es una ruina? ¿Por qué no termináis de tirarlo y haceís una construcción nueva? Sería como un galo diciendo "están locos estos romanos".
son tonterías que alguna vez se me han ocurrido. Al final, todas las cosas, según quién las mire tienen más o menos importancia. Por lo tanto, la moraleja es: No os enfadeis por tonterías. No discutais por ideas. (Me tendré que aplicar el cuento) Sed felices.
lunes, 10 de marzo de 2008
¿Quién decís que soy yo?
Como las lecturas de estos días tiene que ver con esta pregunta y, dada la cercanía de la semana santa, me parece curioso este texto de José Luis Martín Descalzo. Lo ideal hubiera diso ponerlo el viernes, antes de irme a mi querida Salamanca, pero como no sé qué tal andaré de tiempo y donde tendré la cabeza, lo pongo hoy. Quién sabe si alguno que lo lea de casualidad viva una semaan santa diferente.
Hace dos mil años un hombre formuló esta pregunta a un grupo de amigos (Evangelio de San Marcos 8, 27). Y la historia no ha terminado aún de responderla. El que preguntaba era simplemente un aldeano que hablaba a un grupo de pescadores. Nada hacía sospechar que se tratara de alguien importante. Vestía pobremente. Él y los que le rodeaban eran gente sin cultura, sin lo que el mundo llama "cultura". No poseían títulos ni apoyos. No tenían dinero ni posibilidades de adquirirlo. No contaban con armas ni con poder alguno. Eran todos ellos jóvenes, poco más que unos muchachos, y dos de ellos -uno precisamente el que hacía la pregunta- morirían antes de dos años con las más violentas de las muertes. Todos los demás acabarían, no mucho después, en la cruz o bajo la espada. Eran, ya desde el principio y lo serían siempre, odiados por los poderosos. Pero tampoco los pobres terminaban de entender lo que aquel hombre y sus doce amigos predicaban. Era, efectivamente, un incomprendido.Los violentos le encontraban débil y manso. Los custodios del orden le juzgaban, en cambio, violento y peligroso. Los cultos le despreciaban y le temían. Los poderosos se reían de su locura. Había dedicado toda su vida a Dios, pero los ministros oficiales de la religión de su pueblo le veían como un blasfemo y un enemigo del cielo. Eran ciertamente muchos los que le seguían por los caminos cuando predicaba, pero a la mayor parte les interesaban más los gestos asombrosos que hacía o el pan que les repartía que todas las palabras que salían de sus labios. De hecho todos le abandonaron cuando sobre su cabeza rugió la tormenta de la persecución de los poderosos y sólo su madre y tres o cuatro amigos más le acompañaron en su agonía.La tarde de aquel viernes, cuando la losa de un sepulcro prestado se cerró sobre su cuerpo, nadie habría dado un céntimo por su memoria, nadie habría podido sospechar que su recuerdo perduraría en algún sitio, fuera del corazón de aquella pobre mujer -su madre- que probablemente se hundiría en el silencio del olvido, de la noche y de la soledad.Y... sin embargo, veinte siglos después, la historia sigue girando en torno a aquel hombre. Los historiadores -aún los más opuestos a él- siguen diciendo que tal hecho o tal batalla ocurrió tantos o cuantos años antes o después de él. Media humanidad, cuando se pregunta por sus creencias, sigue usando su nombre para denominarse. Dos mil años después de su vida y muerte, se siguen escribiendo cada año más de mil volúmenes sobre su persona y doctrina. Su historia ha servido como inspiración para, al menos, la mitad de todo el arte que ha producido el mundo desde que él vino a la tierra. Y, cada año, decenas de miles de hombres y mujeres dejan todo -sus familias, sus costumbres, tal vez hasta su patria- para seguirle enteramente, como aquellos doce primeros amigos.¿Quién, quién es este hombre por quien tantos han muerto, a quien tantos han amado hasta la locura y en cuyo nombre se han hecho también -¡ay!- tantas violencias? Desde hace dos mil años, su nombre ha estado en boca de millones de agonizantes, como una esperanza, y de millares de mártires, como un orgullo. ¡Cuántos han sido encarcelados y atormentados, cuántos han muerto sólo por proclamarse seguidores suyos! Y también -¡ay!- ¡cuantos han sido obligados a creer en él con riesgo de sus vidas, cuantos tiranos han levantado su nombre como una bandera para justificar sus intereses o sus dogmas personales! Su doctrina, paradójicamente, inflamó el corazón de los santos y las hogueras de la Inquisición. Discípulos suyos se han llamado los misioneros que cruzaron el mundo sólo para anunciar su nombre y discípulos suyos nos atrevemos a llamarnos quienes -¡por fin!- hemos sabido compaginar su amor con el dinero.¿Quién es, pues, este personaje que parece llamar a la entrega total o al odio frontal, este personaje que cruza de medio a medio la historia como una espada ardiente y cuyo nombre -o cuya falsificación- produce frutos tan opuestos de amor o de sangre, de locura magnífica o de vulgaridad? ¿Quién es y qué hemos hecho de él, cómo hemos usado o traicionado su voz, qué jugo misterioso o maldito hemos sacado de sus palabras? ¿Es fuego o es opio? ¿Es bálsamo que cura, espada que hiere o morfina que adormila? ¿Quién es? ¿Quién es? Pienso que el hombre que no ha respondido a esta pregunta puede estar seguro de que aún no ha comenzado a vivir. Gandhi escribió una vez: "Yo digo a los hindúes que su vida será imperfecta si no estudian respetuosamente la vida de Jesús". ¿Y qué pensar entonces de los cristianos -¿cuántos, Dios mío?- que todo 1o desconocen de él, que dicen amarle, pero jamás le han conocido personalmente?Y es una pregunta que urge contestar porque, si él es lo que dijo de sí mismo, si él es lo que dicen de él sus discípulos, ser hombre es algo muy distinto de lo que nos imaginamos, mucho más importante de lo que creemos. Porque si Dios ha sido hombre, se ha hecho hombre, gira toda la condición humana. Si, en cambio, él hubiera sido un embaucador o un loco, media humanidad estaría perdiendo la mitad de sus vidas.Conocerle no es una curiosidad. Es mucho más que un fenómeno de la cultura. Es algo que pone en juego nuestra existencia. Porque con Jesús no ocurre como con otros personajes de la historia. Que César pasara el Rubicón o no lo pasara, es un hecho que puede ser verdad o mentira, pero que en nada cambia el sentido de mi vida. Que Carlos V fuera emperador de Alemania o de Rusia, nada tiene que ver con mi salvación como hombre. Que Napoleón muriera derrotado en Elba o que llegara siendo emperador al final de sus días no moverá hoy a un solo ser humano a dejar su casa, su comodidad y su amor y marcharse a hablar de él a una aldehuela del corazón de África.Pero Jesús no, Jesús exige respuestas absolutas. Él asegura que, creyendo en él, el hombre salva su vida e, ignorándole, la pierde. Este hombre se presenta como el camino, la verdad y la vida (Juan 14, 6). Por tanto -si esto es verdad- nuestro camino, nuestra vida, cambian según sea nuestra respuesta a la pregunta sobre su persona. ¿Y cómo responder sin conocerle, sin haberse acercado a su historia, sin contemplar los entresijos de su alma, sin haber leído y releído sus palabras?"Del libro "Vida y misterio de Jesús de Nazaret".
Jose Luis Martin Descalzo
Hace dos mil años un hombre formuló esta pregunta a un grupo de amigos (Evangelio de San Marcos 8, 27). Y la historia no ha terminado aún de responderla. El que preguntaba era simplemente un aldeano que hablaba a un grupo de pescadores. Nada hacía sospechar que se tratara de alguien importante. Vestía pobremente. Él y los que le rodeaban eran gente sin cultura, sin lo que el mundo llama "cultura". No poseían títulos ni apoyos. No tenían dinero ni posibilidades de adquirirlo. No contaban con armas ni con poder alguno. Eran todos ellos jóvenes, poco más que unos muchachos, y dos de ellos -uno precisamente el que hacía la pregunta- morirían antes de dos años con las más violentas de las muertes. Todos los demás acabarían, no mucho después, en la cruz o bajo la espada. Eran, ya desde el principio y lo serían siempre, odiados por los poderosos. Pero tampoco los pobres terminaban de entender lo que aquel hombre y sus doce amigos predicaban. Era, efectivamente, un incomprendido.Los violentos le encontraban débil y manso. Los custodios del orden le juzgaban, en cambio, violento y peligroso. Los cultos le despreciaban y le temían. Los poderosos se reían de su locura. Había dedicado toda su vida a Dios, pero los ministros oficiales de la religión de su pueblo le veían como un blasfemo y un enemigo del cielo. Eran ciertamente muchos los que le seguían por los caminos cuando predicaba, pero a la mayor parte les interesaban más los gestos asombrosos que hacía o el pan que les repartía que todas las palabras que salían de sus labios. De hecho todos le abandonaron cuando sobre su cabeza rugió la tormenta de la persecución de los poderosos y sólo su madre y tres o cuatro amigos más le acompañaron en su agonía.La tarde de aquel viernes, cuando la losa de un sepulcro prestado se cerró sobre su cuerpo, nadie habría dado un céntimo por su memoria, nadie habría podido sospechar que su recuerdo perduraría en algún sitio, fuera del corazón de aquella pobre mujer -su madre- que probablemente se hundiría en el silencio del olvido, de la noche y de la soledad.Y... sin embargo, veinte siglos después, la historia sigue girando en torno a aquel hombre. Los historiadores -aún los más opuestos a él- siguen diciendo que tal hecho o tal batalla ocurrió tantos o cuantos años antes o después de él. Media humanidad, cuando se pregunta por sus creencias, sigue usando su nombre para denominarse. Dos mil años después de su vida y muerte, se siguen escribiendo cada año más de mil volúmenes sobre su persona y doctrina. Su historia ha servido como inspiración para, al menos, la mitad de todo el arte que ha producido el mundo desde que él vino a la tierra. Y, cada año, decenas de miles de hombres y mujeres dejan todo -sus familias, sus costumbres, tal vez hasta su patria- para seguirle enteramente, como aquellos doce primeros amigos.¿Quién, quién es este hombre por quien tantos han muerto, a quien tantos han amado hasta la locura y en cuyo nombre se han hecho también -¡ay!- tantas violencias? Desde hace dos mil años, su nombre ha estado en boca de millones de agonizantes, como una esperanza, y de millares de mártires, como un orgullo. ¡Cuántos han sido encarcelados y atormentados, cuántos han muerto sólo por proclamarse seguidores suyos! Y también -¡ay!- ¡cuantos han sido obligados a creer en él con riesgo de sus vidas, cuantos tiranos han levantado su nombre como una bandera para justificar sus intereses o sus dogmas personales! Su doctrina, paradójicamente, inflamó el corazón de los santos y las hogueras de la Inquisición. Discípulos suyos se han llamado los misioneros que cruzaron el mundo sólo para anunciar su nombre y discípulos suyos nos atrevemos a llamarnos quienes -¡por fin!- hemos sabido compaginar su amor con el dinero.¿Quién es, pues, este personaje que parece llamar a la entrega total o al odio frontal, este personaje que cruza de medio a medio la historia como una espada ardiente y cuyo nombre -o cuya falsificación- produce frutos tan opuestos de amor o de sangre, de locura magnífica o de vulgaridad? ¿Quién es y qué hemos hecho de él, cómo hemos usado o traicionado su voz, qué jugo misterioso o maldito hemos sacado de sus palabras? ¿Es fuego o es opio? ¿Es bálsamo que cura, espada que hiere o morfina que adormila? ¿Quién es? ¿Quién es? Pienso que el hombre que no ha respondido a esta pregunta puede estar seguro de que aún no ha comenzado a vivir. Gandhi escribió una vez: "Yo digo a los hindúes que su vida será imperfecta si no estudian respetuosamente la vida de Jesús". ¿Y qué pensar entonces de los cristianos -¿cuántos, Dios mío?- que todo 1o desconocen de él, que dicen amarle, pero jamás le han conocido personalmente?Y es una pregunta que urge contestar porque, si él es lo que dijo de sí mismo, si él es lo que dicen de él sus discípulos, ser hombre es algo muy distinto de lo que nos imaginamos, mucho más importante de lo que creemos. Porque si Dios ha sido hombre, se ha hecho hombre, gira toda la condición humana. Si, en cambio, él hubiera sido un embaucador o un loco, media humanidad estaría perdiendo la mitad de sus vidas.Conocerle no es una curiosidad. Es mucho más que un fenómeno de la cultura. Es algo que pone en juego nuestra existencia. Porque con Jesús no ocurre como con otros personajes de la historia. Que César pasara el Rubicón o no lo pasara, es un hecho que puede ser verdad o mentira, pero que en nada cambia el sentido de mi vida. Que Carlos V fuera emperador de Alemania o de Rusia, nada tiene que ver con mi salvación como hombre. Que Napoleón muriera derrotado en Elba o que llegara siendo emperador al final de sus días no moverá hoy a un solo ser humano a dejar su casa, su comodidad y su amor y marcharse a hablar de él a una aldehuela del corazón de África.Pero Jesús no, Jesús exige respuestas absolutas. Él asegura que, creyendo en él, el hombre salva su vida e, ignorándole, la pierde. Este hombre se presenta como el camino, la verdad y la vida (Juan 14, 6). Por tanto -si esto es verdad- nuestro camino, nuestra vida, cambian según sea nuestra respuesta a la pregunta sobre su persona. ¿Y cómo responder sin conocerle, sin haberse acercado a su historia, sin contemplar los entresijos de su alma, sin haber leído y releído sus palabras?"Del libro "Vida y misterio de Jesús de Nazaret".
Jose Luis Martin Descalzo
Ya no es lo que era
Olvidé citar esta mañana una cosa que me tiene desconcertado. Cierto es que yo no suelo ser seguidor de Eurovisión, pero lo del chililileches este es la repera. ¿Sabeís quien nos va a representar en Eurovisión? Un tío estrafalario que suspendió las clases de canto con Georgie Dan. No sé si hará la canción del verano, pero yo a eso no lo llamo canción. Aún recuerdo de niño cuanto me gustaba ver Eurovisión. Y ahora parace ser que no le interesa a nadie. dicen por ahí que este sujeto fue votado en un concurso el otro día apar representarnos. Y una de dos, o el público que ha votado ha querido ver lo influenciable que puede llegar a ser su voto, tomandose a chufla al sujeto este y en broma votarlo para que nos representara, o bien el público español que aún es forofo de eurovisión se ha vuelto gilipollas. Un artista de otro país que vea y oiga (no digo "escuche" porque no merece el esfuerzo) a este ser seguro que se plantea el estar en un concurso como ese. A dónde hemos ido a parar. Y mi tía de Valencia no ha dicho nada. Igual ha sido más inteligente que yo y no ha gastado esfuerzos para comentar tontería semejante.
Otra cosa que me hace gracia es un programa local de punto radio barcelona donde hay una especie de "echadora de cartas" llamada IRIS y contesta a los que llaman preocupados por su economía o sus problemas de pareja. Llama una preguntando por su salud. La Iris esta le dice que ella en salud no se mete que no es médico. Le pregunta entonces por su pareja, y le dice que no se preocupe, que tienen sus más y sus menos como toda pareja pero que en general todo va bien. ¿Cómo que no se preocupe? Las relaciones hay que cuidarlas, que si no se mueren. Y pensar que muchas personas creen en este tipo de cosas... Da por saco que existan "listos" que por sacar dinero se aprovechen de la ignorancia de los demás (lo mismo dirán de los curas y la cesta que pasan los domingos en misa, pero hoy no voy a entrar en ese tema), sino que el programa de radio en cuestión, de publicidad y ponga un programa-publicidad para que esta gente parezca que tiene una profesión seria. No me gusta.
Otra cosa que me hace gracia es un programa local de punto radio barcelona donde hay una especie de "echadora de cartas" llamada IRIS y contesta a los que llaman preocupados por su economía o sus problemas de pareja. Llama una preguntando por su salud. La Iris esta le dice que ella en salud no se mete que no es médico. Le pregunta entonces por su pareja, y le dice que no se preocupe, que tienen sus más y sus menos como toda pareja pero que en general todo va bien. ¿Cómo que no se preocupe? Las relaciones hay que cuidarlas, que si no se mueren. Y pensar que muchas personas creen en este tipo de cosas... Da por saco que existan "listos" que por sacar dinero se aprovechen de la ignorancia de los demás (lo mismo dirán de los curas y la cesta que pasan los domingos en misa, pero hoy no voy a entrar en ese tema), sino que el programa de radio en cuestión, de publicidad y ponga un programa-publicidad para que esta gente parezca que tiene una profesión seria. No me gusta.
Yo soy la luz del mundo
Después de un día en el que parecía que no iba a salir el sol, pues ha salido. Doy fe con estas fotos tomadas esta mañana. Y anima, no creais que no. Ha ganado el PSOE y no sabemos si nos pintará mejor que la anterior legislatura. Es ahora cuando todos los que hemos ido a votar tenemos que asumir el resultado y tirar todos juntos p'alante. Me alegra sobretodo que ERC, vaya para atrás. Nunca me han gustado los nacionalismos.
Y es que la luz del mundo ilumina a todos, aunque haya algunos que prefieran vivir en la oscuridad. La lectura de hoy es de la más completa actualidad. Un Señor que en el día de ayer, tuvo que volver a la tierra donde querían jugar a la piñata con él (siendo el la piñata) para que su amigo despertara del sueño profundo en el que había caido. (Estaba muerto) . Y lo hizo sobre todo por que veía necesario que los que compartían con él el casnancio del camino necesitaban mucho más para terminar de creer en él. Si aún entonces necesitaban pruebas para poder decir quién creían que era Él, nosotros hoy, lo tenemos sumamente difícil. Preferimos salir en la oscuridad, donde nuestros defectos son menos visibles y nuestra vida puede pasar por una habitación limpia en la penumbra. Una habitación en la que nos da miedo dar la luz, porque pondría al descubierto todo el polvo que antes pasaba inadvertido. Salgamos a la luz, mirad qué bonito es cuando sale el sol.
Este finde me acerqué a El Roc de Sant Gaietá, un minipueblo típico de la época de los piratas, en Roda de Bará. Muy bonito. Hay un restaurante con una terraza que linda con el mar donde un madrileño disfrutaría de una cerveza bien fría. Me gustó. Ahí van unas fotos de nuestro paso por ahí. Fue una vuelta corta proque teníamos que montar unas estanterías de esas metálicas que estaban de oferta. Y es que nos hemos mudado de garaje con trastero, y había que poner orden en él desde el principio. Y ya nos hemos mudado. Muy contentos.
viernes, 7 de marzo de 2008
Todos le quieren echar mano
Recorría ese Señor tierras de Galilea, dado que por Judea no le tenían mucho cariño precisamente. Decían por aquel entonces que si el Mesías debía venir, no sabrían de donde vendría. Y el pobre Señor, decía que a Él le conocían y sabía de donde venía, pero no conocían a Aquél de quien procedía. Un galimatías para la época y para nuestros días. Y sigo pensando que no tiene importancia. Si ya su presencia no iluminaba sus corazones, poco podemos hacer nosotros si tampoco lo "vemos". Pero quiero darle la vuelta a la frase de que todos querían echarle mano. Nosotros deberíamo querer echarle mano, pero no para depeñarlo por ahí caul cabra por un campanario, si no para guardarlo. Y no para guardarlo celosamente bajo una baldosa de nuestra cocina para que nadie nos lo quite. Como gran tesoro que es, tendríamos que tener un deseo irrefenable de echarle mano apra guardarlo y para darlo. Por que la luz no está concebida para mantenerse debajo del candelero. La luz está echar para iluminar.
Y mientras algunos tienen orgasmos democráticos, unos detrás de otros, otros, en el día internacional de la mujer, pertenecientes a un organismo de la mujer catalán, publican un eslogan que viene en todos los idiomas posbiles salvo el castellano. Y esto a algunos les ha molestado. Mientras los de ERC tendrán orgasmos con estos rebotes que cogen los otros.
En Israel, ocho estudiantes han muerto asesinados por un palestino. Ya está liada. Aquellos lares tienen una gran tradicidión en conflictos. A ver en qué desemboca todo esto. Desde luego, estudiar allí debe ser considerado como un acto de valor. Y vuelvo a ver el detector de bombas de mi oficina. No sé, tengo la sensación de que es una forma de provocar a que nos manden un paquete bomba para ver si sabemos utilizar el cacharrito. No me gusta. Al igual que pienso que nadie debería llevar armas, como hacen en EEUU. Esas cosas no me hacen sentir más seguro.
Todo pinta mal. Pero no seamos cenizos. Alegrémos el corazón. No nos dejemos vencer por el desánimo. Y a votar. (Yo ya voté). Buen fin de semana.
Y mientras algunos tienen orgasmos democráticos, unos detrás de otros, otros, en el día internacional de la mujer, pertenecientes a un organismo de la mujer catalán, publican un eslogan que viene en todos los idiomas posbiles salvo el castellano. Y esto a algunos les ha molestado. Mientras los de ERC tendrán orgasmos con estos rebotes que cogen los otros.
En Israel, ocho estudiantes han muerto asesinados por un palestino. Ya está liada. Aquellos lares tienen una gran tradicidión en conflictos. A ver en qué desemboca todo esto. Desde luego, estudiar allí debe ser considerado como un acto de valor. Y vuelvo a ver el detector de bombas de mi oficina. No sé, tengo la sensación de que es una forma de provocar a que nos manden un paquete bomba para ver si sabemos utilizar el cacharrito. No me gusta. Al igual que pienso que nadie debería llevar armas, como hacen en EEUU. Esas cosas no me hacen sentir más seguro.
Todo pinta mal. Pero no seamos cenizos. Alegrémos el corazón. No nos dejemos vencer por el desánimo. Y a votar. (Yo ya voté). Buen fin de semana.
jueves, 6 de marzo de 2008
Todos hemos pensado en la muerte.
Uff, estoy lleno. Me han puesto en la comida para mi sólo una botella de 1,25 l y, claro, aunque no la he bebido toda, he bebido mucho y la sensación de estar a punto de reventar hace mella en mi. Pero no echaré la raba.
Acabo de encontrar esta foto (recién llegado a Burgos). No creo que exista mucha gente con una foto como esta. Estoy encima de un tren carrilero de barras de 144m en marcha. Qué tiempos aquellos. Iván, el que me sacó a mi la foto, tiene una parecida. Seremos los únicos.
Mientras comía, a mi derecha había un grupo de tres personas comiendo, del gremio de profesores, deduje por como hablaban despectivamente de alumnos. Uno de ellos, que decía tener 33 años estaba muy gastado. SI TIENE UN AÑO MÁS QUE YO Y PARECE QUE ME SACA 20. Pues estaban frivolizando sobre el tema de la muerte. Este vejestorio de 33 años es fumador empedernido. Sus compañeros hablaban sobe esas estadísticas que van sobre los años de vida que se deducen de uno en función de lo que fume diariamente. Como todos los fumadores, el tío era optimista. Se consideraba dentro del grupo de esas excepciones estadísticas de gente que lleva fumando desde su adolescencia y consigue llegar a os 90 años.
En fin, el tema no va por ahí. Esta conversación robada por mi me hizo recordar esas veces que, siendo un adolescente con más inquietudes que ahora (ahora sólo me preocupa la hipoteca), pensaba en la muerte. Y lo que más pena me daba entonces no era yo, que dejaba de existir. Me daba pena la gente que dejaba sin mi grata compañía. ¿Quién les iba a hacer pasar buenos momentos a partir de ahora? ¿Quién les iba a hacer reir?¿Quién se iba a preocupar por ellos? Y ahora, mientras comía, si me muriera, pienso en todo aquello que dejaré de hacer, que dejaré de ver, las personas que no volveré a ver ni disfrutar de su compañía. Y mientras pienso todo esto, reflexiono sobre cuál de las dos actitudes es más egoista. No lo sé. La primera, igual, más que egoista es ególatra. Y si me ablando, no es que hubiera sido, sino que me tenía en gran estima. No hacía falta tener abuela. La de ahora sí parece ser más egoísta, pues pienso en todo eso que me gusta y perderé.
Hablar de muerte no suele gustar por que es tema yu-yu. No sé si será una señal. Hoy mismo nos acaban de instalar un aparato de esos de rayos-X por el que pasar los paquetes, cartas, etc, para prevenir cualquier paquete o carta bomba. Sorprendente. Ahora vamos a tener que temer abrir cualquier paquete o carta. Y todo viene, según me he enterado, a raíz del problema que existe con la Y vasca. Se conoce que hace 1 o dos semanas, rompieron los cristales del portal de nuestra sede en Bilbao. Y hay que extremar las precauciones. Es la primera vez que me considero blanco de una panda de delincuentes.
Aprenderemos de los fumadores para seguir viviendo tranquilamente: "de algo hay que morir".
Acabo de encontrar esta foto (recién llegado a Burgos). No creo que exista mucha gente con una foto como esta. Estoy encima de un tren carrilero de barras de 144m en marcha. Qué tiempos aquellos. Iván, el que me sacó a mi la foto, tiene una parecida. Seremos los únicos.
Mientras comía, a mi derecha había un grupo de tres personas comiendo, del gremio de profesores, deduje por como hablaban despectivamente de alumnos. Uno de ellos, que decía tener 33 años estaba muy gastado. SI TIENE UN AÑO MÁS QUE YO Y PARECE QUE ME SACA 20. Pues estaban frivolizando sobre el tema de la muerte. Este vejestorio de 33 años es fumador empedernido. Sus compañeros hablaban sobe esas estadísticas que van sobre los años de vida que se deducen de uno en función de lo que fume diariamente. Como todos los fumadores, el tío era optimista. Se consideraba dentro del grupo de esas excepciones estadísticas de gente que lleva fumando desde su adolescencia y consigue llegar a os 90 años.
En fin, el tema no va por ahí. Esta conversación robada por mi me hizo recordar esas veces que, siendo un adolescente con más inquietudes que ahora (ahora sólo me preocupa la hipoteca), pensaba en la muerte. Y lo que más pena me daba entonces no era yo, que dejaba de existir. Me daba pena la gente que dejaba sin mi grata compañía. ¿Quién les iba a hacer pasar buenos momentos a partir de ahora? ¿Quién les iba a hacer reir?¿Quién se iba a preocupar por ellos? Y ahora, mientras comía, si me muriera, pienso en todo aquello que dejaré de hacer, que dejaré de ver, las personas que no volveré a ver ni disfrutar de su compañía. Y mientras pienso todo esto, reflexiono sobre cuál de las dos actitudes es más egoista. No lo sé. La primera, igual, más que egoista es ególatra. Y si me ablando, no es que hubiera sido, sino que me tenía en gran estima. No hacía falta tener abuela. La de ahora sí parece ser más egoísta, pues pienso en todo eso que me gusta y perderé.
Hablar de muerte no suele gustar por que es tema yu-yu. No sé si será una señal. Hoy mismo nos acaban de instalar un aparato de esos de rayos-X por el que pasar los paquetes, cartas, etc, para prevenir cualquier paquete o carta bomba. Sorprendente. Ahora vamos a tener que temer abrir cualquier paquete o carta. Y todo viene, según me he enterado, a raíz del problema que existe con la Y vasca. Se conoce que hace 1 o dos semanas, rompieron los cristales del portal de nuestra sede en Bilbao. Y hay que extremar las precauciones. Es la primera vez que me considero blanco de una panda de delincuentes.
Aprenderemos de los fumadores para seguir viviendo tranquilamente: "de algo hay que morir".
No queréis recibir la vida que os doy.
Este me gusta más. Se parece a lo que dije ayer. Y es que es complicado para el hombre creer en algo que no salga del hombre. Ya De Gaule, antes de perder una batalla o la guerra, presumía de encomendarse a sí mismo, pues no creía en Dios. Pues el Señor ese que hace 2000 años decía a los judíos, más fieles a un Moisés que bien podía haberse fumado un porrete cuando decía que una zarza en llamas sin consumirse le estaba hablando, no eran capaces de reconocer en su corazón a la "vida" que tenían delante. Ni aún teniendo un enviado por él, refiriéndose a un tal Juan el Bautista, eran capaces de ver lo que tenían delante. Y es que hay que oir con los oidos del corazón. Y hay que ver con los ojos del corazón. En definitiva, hay que querer. Pero eso precisamente es lo más grande que tenemos. La libertad de elegir, la libertad de equivocarnos, y la libertad de pedir perdón cuando reconocemos que nos hemos equivocado o dañado a alguien de cualquier forma.
Y es difícil prestar atención a los oidos y ojos del corazón cuando se destape en un par de meses que las listas de despidos son enormemente preocupantes. Mucho más de lo que se deja traslucir por los medios de comunicación en estos momentos. Se están tapando muchas desgracias para no empañar estas elecciones.
Pues tengo ganas de que llegue la semana santa para irme a Salamanca. Además de por las vacaciones, la celebráción de la Pasión y Resurrección de aquél Señor y demás gaitas, me quiero cortar el pelo. Ya mi novia y amigos no entienden mi obsesión por cortarme el pelo en el mismo sitio. No me digais por qué, pero si fuera a otro peluquero, sentiría que le estoy poniendo los cuernos. Y es que él ya sabe como quiero que me lo corten. Y desde que me fui de Salamanca por motivos laborales, hace ya 9 años, no he dejado nunca de acudir a mi peluquero. No sé que haré cuando se jubile.
Y es difícil prestar atención a los oidos y ojos del corazón cuando se destape en un par de meses que las listas de despidos son enormemente preocupantes. Mucho más de lo que se deja traslucir por los medios de comunicación en estos momentos. Se están tapando muchas desgracias para no empañar estas elecciones.
Pues tengo ganas de que llegue la semana santa para irme a Salamanca. Además de por las vacaciones, la celebráción de la Pasión y Resurrección de aquél Señor y demás gaitas, me quiero cortar el pelo. Ya mi novia y amigos no entienden mi obsesión por cortarme el pelo en el mismo sitio. No me digais por qué, pero si fuera a otro peluquero, sentiría que le estoy poniendo los cuernos. Y es que él ya sabe como quiero que me lo corten. Y desde que me fui de Salamanca por motivos laborales, hace ya 9 años, no he dejado nunca de acudir a mi peluquero. No sé que haré cuando se jubile.
miércoles, 5 de marzo de 2008
El Hijo da vida a quien quiere
Buenos días a todos. A partir de ahora mis actualizaciones no siempre serán a primera hora de lamañana, debido todo ello a que no siempre estaré en la oficina a primera hora. Comienzo obras que requerirán de mi presencia y, es posible, que algún día de je de pasar por la oficina, que es donde tengo acceso al blog y a mi correo electrónico. el internés ese lo tengo capado, no tengo acceso libre. Doy esta explicación a todos aquellos que compartis conmigo mis devaneos de cabeza y tanta ilusión me hace leer vuestro comentarios y vuestros blogs. Os habréis fijado que normamente titulo cada día con una frase resumen del Evangelio del día sobre el que oran miles de cristianos en todo el mundo. Siempre me ha sorprendido saber que millones de personas están leyendo el mismo texto que tú. Este año y los venideros, me he propuesto leer todas las mañanas el Evangelio del día. Y, aunque no busco tiempo para la oración (observad que no he dicho "no tengo tiempo"), procuro a lo largo del día intentar acordarme de lo que he leido cuando me he levantado y buscarle alguna aplicación práctica en lo que me acontece en el día. Atendiendo a la lectura de hoy, en un primer vistazo puede parecer que el Señor ese de esa época era "selecto" con quién hacía milagros, hablaba, etc. Pero si atendemos a un contexto más amplio, y en esta ocasión sale citado en otro modo también, da a quien quiere recibir. Pero mola más pensar que es Él quien elige. "Muchos son los llamados pero pocos los elegidos" "Quien queira oir, que oiga". Desde esa libertad que se nos ha sido dada, somos nosotros quien tenemos que decidir si aceptamos esa "vida" que el nos vende, perdón, nos da. Lo malo de lecturas como esta es que se enrolla con cosas que si el Hijo viene del Padre hace lo que el Padre quiere, y lo que el hijo haga o deshaga, como viene del Padre, el Padre está de cuerdo con el obrar del hijo, etc. Esto es para leerlo de corrido y no entrar en ello, pues carece de importancia. Carece de importancia siempre y cuando partamos del hecho de que ese Señor es Dios hecho hombre. Pero estoy seguro que ese señor se conforma conque llevemos una vida donde no demos cuartel al odio ni a la envidia. Ya tendremos ocasión de descubir estas "divinidades". Lo importante es vivir esta vida que se nos ha regalado de la mejor forma posible sabiendo que compartimos un mundo con otras personas con las que no podemos estar en guerra constantemente. Que de ser a sí, nos haremos la vida imposible los unos a los otros. Y eso no es el Reino de Dios. Terminando la frase del título :"El Hijo da vida a quien quiere (recibirla)".
Dejando atrás la vena religiosa que me ha salido hoy, comentaré unas cosillas que me han llamado la atención hoy. Un mujer, según creo iraní, a denunciado a su mardio por roñica. Se conoce que el tio, cuando salían e cena, hasta le hacía pagar los cafés a ella. Dicen us costumbres de que la mujer tiene derecho a percibir dote de su marido no sólo en la boda, sino durante toda la vida juntos. Y la justicia le ha dado la razón. Ha condenado al marido a regalarle 124.000 rosas (algo más de 133.000 €). Lo de las rosas fue idea de la mujer. Podría aceptar el dinero, pero le pareció que las rosas sería un modo de hacer detallista al marido. Pero no penseis que le llegará un día un camión con rosas y se las volcará en la puerta de casa, no. Diariamente le llegará de su marido un ramillete de 5 rosas, así hasta las 124.000 rosas. Curiosa la elección de la mujer, que podría haber pedido la pasta y tener algún caprichito. Eso sí, ya no podrá decir que el marido no tiene detalles con ella, porque 5 rosas todos los días ahsta las 124 mil, son muchos días, 68 años haciendo una cuenta gorda. El tío tiene que acabar sequito todas las noches, ja, ja, ja. Por dar un matiz frívolo al asunto. Ya se sabe que una mujer alagada pide guerra por las noches, ja, ja, ja. No sé si sera un comentario machista, pero también os digo que tampoco sé si es verdad, la digo por la gracia. Igual tengo la gracia en el culo, en fin, que no sé que añadirle.
Ayer me fui a la cama a las 21:30. Caí grogui. Qué bien he dormido hoy. Hasta las 6:30 son casi 9 horas. No está mal. Lo malo de esto es que luego llega el finde y a uno le entra el sueño enseguida. Y mientras el resto de la gente hace vida nocturna (para luego dormir la mañana del sábado y del domingo hasta las 13 h), un servidor a las 9:30 o 10:30 (depende de lo agustito que esté en la cama) ya se ha levantado y disfruta de un paseo por la playa después e hacer algún recado. Me gusta aprovechar las mañanas. Hasta mañana.
Dejando atrás la vena religiosa que me ha salido hoy, comentaré unas cosillas que me han llamado la atención hoy. Un mujer, según creo iraní, a denunciado a su mardio por roñica. Se conoce que el tio, cuando salían e cena, hasta le hacía pagar los cafés a ella. Dicen us costumbres de que la mujer tiene derecho a percibir dote de su marido no sólo en la boda, sino durante toda la vida juntos. Y la justicia le ha dado la razón. Ha condenado al marido a regalarle 124.000 rosas (algo más de 133.000 €). Lo de las rosas fue idea de la mujer. Podría aceptar el dinero, pero le pareció que las rosas sería un modo de hacer detallista al marido. Pero no penseis que le llegará un día un camión con rosas y se las volcará en la puerta de casa, no. Diariamente le llegará de su marido un ramillete de 5 rosas, así hasta las 124.000 rosas. Curiosa la elección de la mujer, que podría haber pedido la pasta y tener algún caprichito. Eso sí, ya no podrá decir que el marido no tiene detalles con ella, porque 5 rosas todos los días ahsta las 124 mil, son muchos días, 68 años haciendo una cuenta gorda. El tío tiene que acabar sequito todas las noches, ja, ja, ja. Por dar un matiz frívolo al asunto. Ya se sabe que una mujer alagada pide guerra por las noches, ja, ja, ja. No sé si sera un comentario machista, pero también os digo que tampoco sé si es verdad, la digo por la gracia. Igual tengo la gracia en el culo, en fin, que no sé que añadirle.
Ayer me fui a la cama a las 21:30. Caí grogui. Qué bien he dormido hoy. Hasta las 6:30 son casi 9 horas. No está mal. Lo malo de esto es que luego llega el finde y a uno le entra el sueño enseguida. Y mientras el resto de la gente hace vida nocturna (para luego dormir la mañana del sábado y del domingo hasta las 13 h), un servidor a las 9:30 o 10:30 (depende de lo agustito que esté en la cama) ya se ha levantado y disfruta de un paseo por la playa después e hacer algún recado. Me gusta aprovechar las mañanas. Hasta mañana.
martes, 4 de marzo de 2008
Vaya día
Hoy me he levantado a las seis y ni siquiera me ha dado tiempo para hacer mis ejercicios matutinos. He llegado a Allenroc a las 7:30 más sólo que la una. Pensando que a esas horas no habría atasco... HABÍA. ¿Es que la gente tiene afición a madrugar para atascarse? Están locos estos catalanes.
Tampoco pude leer la lectura del día. Desde lidiar con la Asistencia Técnica hasta comentar los detalles de la señalización de la obra con el cabo de la Guardia Urbana (que no Real), pasando por descargar vallas y trabajos de peon. Si yo contara lo que he hecho hoy, nadie adivinaría el papel que desempeño en la empresa.
El debate de ayer un rollo. Sólo hablan de lo mismo. y perder el tiempo debatiendo que cuál fue la primera pregunta... Hoy caeré igual de rendido que ayer en la cama o más. Estuve viendo Aida. Qué buenos momentos me hace pasar. Vaya carcajadas. Soy tan simple que una de las veces que más me reí fue cuando fidel se tiró un pedo. ja, ja, ja. Todavía me acuerdo. Ja, ja,ja! "¡´Qué contrariedad"-dijo, ja, ja, ja.
Tampoco pude leer la lectura del día. Desde lidiar con la Asistencia Técnica hasta comentar los detalles de la señalización de la obra con el cabo de la Guardia Urbana (que no Real), pasando por descargar vallas y trabajos de peon. Si yo contara lo que he hecho hoy, nadie adivinaría el papel que desempeño en la empresa.
El debate de ayer un rollo. Sólo hablan de lo mismo. y perder el tiempo debatiendo que cuál fue la primera pregunta... Hoy caeré igual de rendido que ayer en la cama o más. Estuve viendo Aida. Qué buenos momentos me hace pasar. Vaya carcajadas. Soy tan simple que una de las veces que más me reí fue cuando fidel se tiró un pedo. ja, ja, ja. Todavía me acuerdo. Ja, ja,ja! "¡´Qué contrariedad"-dijo, ja, ja, ja.
lunes, 3 de marzo de 2008
Un recuerdo venido de Málaga
¡Hoy me ha llegado! el otro día me compré por internet Jim Botón y Lucas el maquinista, y su segunda parte, jim botón y los 13 salvajes. . Hay que decir que es uno de los libros que más me han gustado. Espero que siga gustándome cuando lo vuelva a leer. La segunda parte no la he leido. Espero que esté igual de bien que la primera parte. Lo leí cuando tenía 10 años. Como el que leí no sé por donde anda, decidí volvérmelo a comprar. Han venido remitidos de málaga.
Qué ilusión!
Qué ilusión!
Creyó a Jesús y prosiguió su camino
Vaya pedazo de fin de semana. Estoy de enhorabuena, porque he encontrado un garaje cerrado que viene incluso con un trastero enorme por lo mismo que pagaba donde estoy ahora. Ahora no tendré que darme un paseo enorme paar coger la moto y estará más segura.
Hoy un funcionario real con un hijo enfermo sale a recibir a aquél Señor que había bajado a Judea de Galilea. Y este le dice que se vaya a su casa que el hijo ya ha sanado. Y este señor SE VA A SU CASA creyendo en la palabra. Seguro que fue corriendo. Lo bueno es que cuando llegó si hijo ya estaba sano y los criados le dijeron la hora a partir de la cual empezó a sentirse bien. Y el funcionario comprobó que era la hora en la que le dijeron que estaba sano. No obstante, pese a la fe de este hombre, se nos recuerda que necesitamos signos que ver para creer.
Y es que en este mundo de ahora no nos fiamos ni de nuestra madre. Siempre me gustó que las personas que me rodean confien en mi, de tal forma que nunca tenga que decír que confíen en mi palabra. Cuando nos vemos obligados a decir: "confía en mi palabra" es que poca palabra tenemos. A una persona de palabra se la conoce porque no tiene por qué defender su palabra. Su trayectoria en la vida ya nos indica por dónde va. Yo quiero ser una de estas personas, tener un rumbo, no dar bandazos peligrosos. Pero luego está el tráfico (los demás), que nos hace tomar rutas inesperadas que nos separan de nuestro rumbo y nos pueden hacer perder el norte. Aquí conviene llamar a una de esas virtudes que es la templanza y no tomar decisiones precipitadas.
El domingo nos fuimos hasta el embalse de Riba Roja, de donde es la foto. Hasta allí la carretera fue muy interesante. Un día espléndido.
No sé si me quedaré dormido con el debate de hoy. Previamente me echaré unas risas viendo Aida, que lo grabé en vídeo ayer porque estuve viendo a will smith en Histch (o algo parecido). Desde luego eso de las técnicas de ligue es algo que siempre me ha llamado la atención. Lo que no entiendo es porqué una chica puede llegar a enfadarse si descubre que su chico, para conquistarla, tuvo que tomar clases de algún experto. Coño! SI SE LO HA CURRADO. Si hasta ha ido a clases y todo. Imagino que el que exista una técnica para conquistar a las mujeres las pone en una situación de indefensas. Echa abajo la teoría de que ella es la última que decide. Ya no pueden presumir de impredecibles. Existe una técnica capaz de obtener resultados, por tanto de predecir su reacción. Pero, ¿EXISTE ESTA TÉCNICA? Desde luego, yo nunca he sabido cómo entrarle a una chica. En la peli destacaba sobretodo la importancia de escuchar. Pero yo creo que escuchando te conviertes más en su amiguito y paño de lágrimas. Nunca te verá como un posible polvo.
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