jueves, 28 de agosto de 2008

Estad preparados. Viene el Hijo del Hombre. Mt 24, 42-51

¡Qué mala noticia! Si ayer elogiaba a Demo por su blog, hoy tengo el disgusto de descubrir que yo no nos deleitará más con su presencia, salvo aquellos agraciados que la conozcan en persona.

Muchas veces hablé (o al menos pensé y me reserve una opinión acerca de los propietarios de los blogs que puede herir sensibilidades) del rasgo de personalidad de quien crea un blog. Un rasgo general de todo propietario de blog corresponde a personas con algún tipo de “problema” en su vida normal, o que tiene espinitas que le impiden vivir la vida de forma plena, siendo el blog una especie de refugio. Refugio donde otros en situación parecida y con sus circunstancias personales dejan comentarios de apoyo, siempre positivos. Podríamos denominarlo “Ciberterapias de grupo”. Yo siempre he pensado ser una persona que sabe disfrutar de los pequeños momentos que da la vida, asumiendo los altibajos que tiene esta desarrollando un increíble afán por superarlos. Pero siempre me consideré feliz. El hecho de descubrir el mundo de los blogs no sé si supone que me incluya en “ciberterapia de grupo”. Al menos sí me parece un medio más que pone la vida para conocer a más personas, aunque sea a distancia.

El caso es que Demo ha clausurado su blog con una carta de la que sin su permiso voy a transcribir y hacer algunos comentarios de lo que pienso al respecto, sintiendo mucho ofender, que no es mi intención, pero lo que digo puede no gustarle a alguien.


“Ya sabéis los que tenéis blogs de este tipo que no todo es oro lo que reluce, que no somos lo que parecemos y que, detrás de la pantalla, normalmente se esconde alguien que poco tiene que ver con la imagen que damos cada día en nuestro pequeño rincón.”

Puede ser verdad, pero no me lo creo del todo. Siempre pensé que las personas son todas buenas hasta que se demuestre lo contrario, y aún demostrándose lo contrario, nunca y, digo NUNCA, dejaré de creer en lo bueno que todos tenemos dentro. Y si a través de los blogs mostramos nuestra mejor cara, es porque la tenemos, y potenciando lo bueno que tenemos dentro es como ahogaremos lo malo. Y por algo se empieza. Y aunque los ánimos de los comentarios de quienes nos leen suenen a ánimos de barraca y todo sean cosas en su mayor parte bonitas, es válido para que nos empecemos a valorar en lo que somos y ser mejores personas. Y si mostramos ORO, es que tenemos ORO. Y Demo, si relucías y parecía Oro, SEGURO QUE ERAS ORO.

“Démo era un personaje, un alter ego, alguien que tenía parte de mí pero cuyos rasgos más característicos eran precisamente todo lo que yo no puedo ser, dicharachera, graciosa, descarada y muy, muy optimista”

Sé que estoy sacando sus frases del contexto de la carta, pero me viene muy bien para lo que me gustaría decirle a Demo. Deberías pensar que normalmente, la imagen que damos a los demás, suele ser la que más debería importarnos, pues según tratemos a los otros, así seremos, ya podemos pensar que somos buena gente jodiendo al vecino, que si el vecino se siente jodido, es que no somos tan buenos como nos cremos. Y si alguien ha pensado que eres dicharachera, graciosa, descarada y muy, muy optimista… NO DUDES que algo tendrás de esas cualidades. Muchas veces para sacar las buenas cualidades que todo ser humano tiene, tenemos que empezar por fingir que somos cojonudos. Y sorprende ver que cuanto más tiempo se finge, uno llega hasta creérselo y llega un punto (Todo un Punto) en que uno no se da cuenta ya de que ha dejado de fingir, que es realmente el personaje que ha querido ser y ha desterrado por fin esas malas cualidades que creía tener. Los que te conozcan de siempre, tendrán una imagen de cómo eras siempre. Pero pensar que nadie es capaz de cambiar… ¿no es irreal? Si Jesús no fue profeta en su tierra. Que nadie de tu entorno cercano diga que no puedes ser todo lo que te gustaría ser porque te recuerda que siempre fuiste de otra manera.

Todo este mundo de Internet ha sido mi placebo durante el último año, mi microcosmos donde he encontrado un cierto modo de compañía, amistad y consuelo y con el que me he evadido y he eludido enfrentarme a mi vida real y mis problemas. Poco importaba que nada funcionase en la realidad si yo tenía mi blog, mis fotos, mi séquito de lectores y mi diversión garantizada todos los días.Ha llegado la hora de ver si mi sospecha de que eso no me deja avanzar y poner orden en mi vida, es cierta o no. Puede que me equivoque, que el blog y mi mundo en Internet nada tenga que ver con el desenlace de mi vida, pero hoy por hoy, siento que están en juego cosas y personas tan importantes, que merece la pena intentarlo.

Está en mis manos llenar ahora mi vida de cosas reales, al igual que un día hice con el blog

Aquí he resumido la última parte de la carta. Me ha parecido muy interesante. Y de una reflexión muy madura de un pensamiento que yo también he tenido. Es curioso como el blog puede ser, como digo antes, un refugio de palabras bonitas de gente que conocemos o no, pero que están ahí; que nos entretengan todos los días y sean como una segunda vida que nos hace olvidar de la primera. A los dos días de poner Internet en casa, me cayó una bronca tácita de mi novia porque (aunque no me lo decía, se notan estas cosas) porque llegaba de trabajar tarde y, en lugar de hablar con ella me ponía rápidamente a actualizar mi blog y comentar en los blogs de mis nuevas amistades blogueras, todo ello corriendo antes de que me entrara el sueño. Debo decir que suelo llegar con sueño a casa y enseguida caigo dormido. A las 22:00, salvo que me desvele una pantalla de ordenador, caigo redondo. Me bastaron 2 días de asedio para darme cuenta de lo que dices, Demo. Esto del blog puede ser una herramienta peligrosa que nos haga evadirnos de la realidad. Algo así como les sucedió a Pedro y Juan con Jesús en el monte Tabor, cuando la transfiguración. Estaban tan gustito ahí arriba, alejados del mundo y viendo cosas tan fantásticas que enseguida pensaron en hacer tres chozas y quedarse ahí para siempre. Desconozco hasta que punto pudiste evadirte de la realidad como dices. No hay más que ver como la sociedad hoy día ha cambiado las costumbres en cuanto a las relaciones personales. Se prefiere chatear con desconocidos a la conversación con los mismos desconocidos en otro ambiente, como pueda ser un bar, la cola de un concierto, un parque… Muchos de los problemas se reducen o solucionan recurriendo al absurdo. Al quitar el blog de tu vida pensando que era la causa de los posibles “males” que no te dejan ver la realidad, es posible que te des cuenta de que no es así. O de que sí, que para eso lo haces. A priori, pienso que pueden ser compatibles ambas “realidades”.

Sin haber querido que la opinión personal pudiera ofenderte a ti o a quienes puedan conocerte, no quería expresar más que me ha gustado conocer tu alter ego.

Y la lectura de hoy no deja de venir al pelo. Jesús nos recuerda que debemos estar alerta, pues no sabemos cuando será nuestro último día. Seguramente de esto sean más conscientes los supervivientes del accidente de barajas que nosotros mismos. Nos dice el evangelio de hoy a modo de parábola que estando alertas, impediremos que el ladrón haga un agujero para entrar en nuestra casa. Demo, por ejemplo, parece haber tomado nota. Ante el peligro que pudiera representar el blog para vivir su verdadera “realidad” como ella dice, ha tomado una decisión, buena o no, pero actúa. Nos cuenta también que si el siervo tiene una obligaciones, no debe irse a emborrachar por ahí con amigos, no sea que venga el amo y le encuentre en el incumplimiento de sus deberes, porque le cogerá y le llevará a un sitio donde será el llanto y rechinar de dientes (qué gracia me ha hecho siempre esto). Habrá quienes interpreten esto como que o eres bueno o irás al infierno. Estos son los que creen en un Dios justiciero, visión que transmite la Biblia en el Antiguo Testamento. No obstante Jesús nos habla de Dios AMOR. Y nos dice que vivamos en el amor. Y con esto pretende decirnos que mientras estemos vivos, tenemos la oportunidad de vivir en ese amor, sin dejar que ese mal que sale de nosotros se apodere de nosotros (Sé que soy redundante con tanto nostotros). Cuando nos llegue la hora, ya será tarde para pretender cambiar. Ese estar alerta significa eso, VIVE Ahora. Una especie de Carpe Diem del amor. Es el momento de dejar de creer en Dios para creer a Dios, a Jesús. Y vivir como el hombre merece vivir. Y olvidar para siempre lo que dijo Hobbes: “El hombre es un lobo para el hombre”.

4 comentarios:

Daphne dijo...

No creo que hayas ofendido a nadie, porque tus palabras han sido amables.Y sinceras. Internet nos ofrece conocer gente a la que si la viéramos cara a cara a lo mejor ni siquiera nos fijaríamos en ellos.
También es cierto que puede llegar a enganchar, pero si tienes un poco de cabeza puedes compaginar tu vida real de la "cibernética". Creo que son compatibles.

Por otro lado, veo que sigues teniendo curiosidad hacia mi persona "real"... es cierto que no tengo blog propio y que por tanto, mis opiniones y comentarios en este blog es lo único que tienes de referencia sobre mí. Poco a poco me irás concociendo, ya te dije llegué a tu blog a través de Demo y que me gustó tu particular visión de nuestro mundo a través de la religión. Estoy de acuerdo en muchas de las cosas que dices. Tú sacas tus conclusiones a través del Evangelio y yo llego a unas parecidas sin pasar por la religión....

LA MAMI dijo...

ESTAD PREPARADOS QUE VIENE LA MAMIIIIIIIIIIIIIIIIIII
COFETEEEEEEEEE GUAPOOOOOOOO RANAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
CELOSOOOOOOOOOOOOOOO

Juani dijo...

buenas, me ha encantado tu post y tambien me ha gustado la carta de despedida de demo, creo que ha sido una persona con mucho valor al tomar esa decision y al contar
el porque de esa decision. Nachete
ves ahora mi blog o sigues teniendo problemas, me a molado
mucho el arias que me has puesto
saluditos

Reales dijo...

¿Se puedeeeee??????. Estoy en la consulta de mi maridito y no he podido resistirme a mirarte un rato. Vuelvo si el avión me devuelve (hay que ver el miedo que llevo) el día 19.
Ni te imaginas lo que me he acordado de ti.
Mil millones de besos.
Como siempre un placer leerte.