jueves, 21 de enero de 2010

Pensamiento infantil

Mucha gente, al enterarse de las cosas que hacía acudía a él.

Una gran multitud de Judea, de Jerusalén, de Idumea, de la Transjordania y de la región de Tiro y Sidón. Personas venidas de los sitios más inverosímiles venían a ver a quien todo lo curaba. La noticia se extendía como un reguero de pólvora.

Jesús pidió una barca, para hablarles desde el agua y evitar que le aplastásen. En aquella época no existía el papamóvil.

Ignoro que pensarán los actuales judíos y musulmanes de Jesús. Bastante claro es que para ellos no era hijo de Dios, pero, ¿pensarán que fue un gilipollas? Debemos pensar que hoy día hay gilipollas que arrastran multitudes.

Hoy quería escribir, pero no tengo claro si quiero transmitir algo o plasmar un pensamiento que por su contenido podríamos denominar infantil.

Que si el nuevo Obispo de San Sebastián, que si el Papa, que si el Rouco, que si los sacerdotes pederastas, que si ... no voy a decir que son gilipollas, claro, pero me pregunto sobre las personas, que son muchas en el mundo, que forjan su opinión de la Iglesia basada en una especie de verdad humana sobre personas que, como yo, también forman parte de la Iglesia (los citados y otros), que son personas y también se equivocan y tienen la capacidad de acometer atrocidades. Voy a intentar explicarme.

Volvamos a remontarnos a los tiempos de Jesús. Jesús, con toda la publicidad mediática de su época, (los medios no eran más que el boca a boca y algún morreo que otro), no iba solo por el mundo. Estaba rodeado, según las escrituras, de al menos 12 personas. En todo grupo que se precie, siempre está el listo, el tonto, el alocado, el simpático, el huraño y, como no, el GILIPOLLAS. ¿Acaso duda alguien de que en el entorno de Jesús no hubiera GILIPOLLAS? Se me llena la boca con esa palabra. Será porque soy el gilipollas más grande al plasmar aquí mi pensamiento.

Es evidente que, estando Jesús rodeado de algún que otro G. , su buena prensa estuviera nublada. Abundan en el evangelio textos que dicen que los discípulos tenían que apartarle a la gente, como guardaespaldas. ¿Suponéis que pensaría un pobrecito con algún mal que, queriendo acercarse a Jesús, le alejaran de Él de un empujón? Supongo que es lo que sienten todas esas personas que como yo, no ven más que guardaepaldas sin conocimiento dando empujones a diestro y siniestro impidiendo que otros se acerquen a Dios.

Sí, ya me sé esas ideas. Que si Jesús los eligió, será por algo, que como me atrevo a decir que podría haber gilipollas entre ellos. Me baso en mi mismo, jeje. Me eligió y no dejo de ser un gili por eso.

Y esas otras que dicen que al ser un personaje público, necesitaba de protección ante las masas para poder repartir mejor el mensaje. Subidme a una barca, dijo Jesús, supongo que sufriendo y cansado de ver a la gente que quería acercársele recibiendo empujones de sus amigos.

¿Cuanta gente entonces dejó de acercarse a Jesús por el comportamiento de sus amigos?

¿Cuanta gente HOY deja de acercarse a Jesús por personas que formamos la Iglesia?

No nos estamos dando cuenta de que empañamos el mensaje. Sin querer nos volvemos más protagonistas que aquellos que son muchos y que trabajan por y para Dios= personas por todos los rincones del mundo. Ellos son la Iglesia que deberían protagonizar la imagen que todos deben conocer.

4 comentarios:

Jo dijo...

Hay nacho, hace tiempo teniendo poquita fé pude apearme de la iglesia y hasta reconfortarme con algun evangelio, con el tiempo desconcertada he descubierto con convicción no se que tanta si poca o mucha que una cosa es la iglesia y otra quienes dirigen

asi que me apeo de reconfortarme sin duda a sabiendas que alguna vez me dijeron que yo no era buena católica puesto que en esta vida de apostatas imaginarios, mesias mediáticos e impostores me queda solo rezar por mantener mi fe en lo que yo crea sea mucho o poco


y si.. seguro soy muy mala... a veces uno se acuerda de dios y le pide piedad cuando nos llueve tupido

Nacho dijo...

Jo: Para el pastor del rebaño, una oveja se separa del rebaño no por mala, sino por traviesa, jeje. Y por ello no deja de formar parte del rebaño, el pastor cuenta con ella. Fíjate que descuidando el rebaño va en busca de la perdida.

Por tanto no creo que seas mala. Y si lo fueras, eso puede cambiar. Lo que es más difícil es que yo deje de ser un gilipollas.

Moadiario dijo...

Uf, tremendo tema has puesto hoy!!!
Yo hace mucho tiempo estuve muy retirada de la iglesia y demás,pero las circunstancias me volvieron a "juntar"; pero siempre intentando dejar a un lado a los q la componen!!
Sigo haciendo las cosas a mi manera y perspectiva.... desde mi creencia...
Besitos y gracias por estar!!!

Nacho dijo...

Moa: Según se mire... a mi no me has dejado de lado y soy Iglesia, jeje.