lunes, 20 de abril de 2009

Jn 20,11-18

María está llorando a la puerta del sepulcro. dos ángeles le preguntan el por qué de sus lloros. Ella dice no saber donde está su señor, que se lo han llevado. Luego ve a un paisano que siendo Jesús, ella no sabe verlo y cree que es el dueño del huerto. Este paisa la llama "MARIA" y es entonces cuando ella le reconoce.

Muy resumidito. Poco que decir. Hoy llegué tarde a casa. Cansado. Con sueño y muchos nervios hoy. Preocupado. Casi como María.

Menos mal que esta tarde me llamó por mi nombre. Y pude reconocerle. ¿Os imaginais lo que pudo sentir María tras perder a Jesús para más tarde encontrarse conque también desapareció su cuerpo? Así me he sentido yo hoy. Con un miedo parecido. Cuando lo tienes todo y de repente parece todo esfumarse.

Pero como digo, me llamó esta tarde, por mi nombre. Y puedo ahora, como María entonces, puedo gritar a los cuatro vientos (ella le dijo a los apóstoles que había visto al señor) poner aquí que yo también le he visto.

Sí, ya sé, parece que me haya tomado unos trippis, pero sé lo que me digo. Ahora lo que se esfuma es el miedo.

6 comentarios:

Eva dijo...

Despues de leer esto solo decir que espero que todo esté bien, desde aquí todo mi ánimo.

Sanve dijo...

Se puede saber que te pusiste en el yogur de anoche?

Estas bien?

Juani dijo...

pues que lo busque en grecia, que ahora alli se encuentra
saluditos

Reales dijo...

Mira Nac!!!!! a mi me lo explicas más claro o no me entero, espero mail urgente!!!!!.


Mil besos

Yoli dijo...

"No cambiaría la risa de mi corazón por la fortuna de las multitudes, tampoco me conformaría con cambiar mis lágrimas por quietud. Tengo la ferviente esperanza de que toda mi vida en esta tierra sea siempre lágrimas y risas". Khalil Gibran
La vida es muchas cosas, es felicidad y alegría, pero también tristeza. Y cada uno de esos momentos de vida son un regalo, una oportunidad que es preciso aprovechar.

CAYE dijo...

BUENOS DÍAS TIENES UN MEME EN MI BLOG SI TE APETECE!!!!!!!!!!