domingo, 9 de agosto de 2009

En la playa




Estaba el sábado pasado en la playa dels Canyerets, en la provincia de Girona. Una calita donde los edificios de la urbanización creada alrededor de este sitio permanecen ocultos. Se parece mucho a una de esas playas vírgenes donde sólo está la naturaleza y tú. (Y miles de gabachos que les gusta este sitio para pasar el verano, imposible no acordarse de la Bruni)

Pues bien. Abrí el libro que estoy leyendo cuando una conversación de adolescentes impidió mi concentración en la obra maestra de Dickens. Dos chicas pusieron sus toallas sobre mi, en 4ª línea de playa si yo estuviera en la tercera. Comenzaron a hablar. Al principio pensé que hablaban entre ellas. Imaginad de qué podían hablar dos chicas de 15-16 años. Evidentemente de chicos. Los sorprendente es que cuando levante la vista, no estaban hablando entre ellas, sino a través de un móvil.

Una de ellas había perdido a la madre de vista. Parecía la más madura (jajaja, madura digo, era por lo que ella quería hacerse pasar). Aconsejaba a la otra que viviera la vida, que era muy joven, jajaja. Imagino que ese consejo saldría de su larga experiencia. Habalaban de los clásicos ligues de verano. De sus noches en las que flirteaban con italianos, ingleses... A la rubia le había hecho tilín un holandés. Hablaban de ellos como si fueran un gran regalo exótico que les pusiera la vida a sus pies.

Debo añadir que me producían cierto rechazo. Pero no era su conversación, que me hacía gracia escuchar y que además me impedía distraerme. Era el pijerío que desprendían. Entre oseas, qué fuertes y demases pestes pijas, no podía seguir con mi lectura.

Por otro lado, esta playa no estaba mal. Era la primera vez que íbamos. La habíamos descubierto la Srta. Pepis y yo en una vuelta en Ciriaca. Y como quería llevar a mis padres a la playa, decidimos aterrizarles en esta. Cubría a los 3 metros de la orilla. El agua estaba cristalina, de un color azul turquesa. El fondo se veía nítido. Daba gusto bañarse.

Volvimos a Girona por Sant Feliu de Guixols, para enseñarles lo turístico del lugar. Cuánto tráfico. No me gustan nada estas carreteras en verano. Ni las afluencias masivas de gente.




3 comentarios:

MARIETA dijo...

O sea.... Qué fuerteeeeee!!
Te quiero mil.
Y esas cosas....
Ja ja ja
Ya te vale, escuchando conversaciones ajenas....

Bruni, Carla, ¡¡of course!! dijo...

Que estuviste en Canyerets?

Ya lo sabíiiia, ya lo sabíiia. (que dice la canción)

Ay, juventud divino tesoro...

BESOS

Scarlet dijo...

Soñando en una playa virgen donde solo está la naturaleza y yo.