Pedro no sabía qué decir, porque estaban llenos de temor.
Entonces una nube los cubrió con su sombra, y salió de ella una voz: "Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo". De pronto miraron a su alrededor y no vieron a nadie, sino a Jesús solo con ellos.
Mientras bajaban del monte, Jesús les prohibió contar lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos.
Ellos cumplieron esta orden, pero se preguntaban qué significaría "resucitar de entre los muertos".
Siempre fue un misterio esta lectura. Si interpretáramos literalmente el texto, Jesús se volvió brillante y blanco. Imagino que adoptó una forma como si de una aparición se tratara (como esas personas que dicen haber visto a la Virgen y te cuentan que no se han cagado de patas abajo). Y encima había voces de ultratumba y todo ("Este es mi hjo amado, el elegido, escuchadle"). Entonces ¿por qué Pedro dijo lo que dio si estaba realmente acojonado?
Una cosa tengo clara. Cuando Pedro dijo que se estaba muy bien, que hicieran tres chozas y se quedaran allí para siempre, quiere decir que el hecho de la transfiguración causó ese sentimiento de paz y ganas de no volver al mundanal ruido. ¿Por qué se llenó Pedro de temor?
En mi vida he conocido a personas que me han entrado por el ojito derecho. Personas que me han despertado gran simpatía y que llego a dejarles hueco en mi estrecho corazón. Y aunque el primer sentimiento que me despiertan es un enorme gracias a Dios por haberlas cruzado en mi vida, viene acompañado ese sentimiento también, como si de la otra cara de la misma moneda se tratase, de un gran miedo a perder toda eso .
Siempre me han dicho que me emociono mucho y pongo demasiado de mi parte al principio de toda relación. Pero nadie sabe el miedo que me entra a perder todo lo bueno que siento que estoy ganando en ese momento. Y creo que Pedro sintió un miedo similar. O, mejor dicho, yo siento un miedo similar al de Pedro. Y me siento como los toreros. Se enfrentan a menudo al mismo miedo, esto es, al toro. Pero si les preguntas si sienten miedo, esperas que te contestes que no, porque deberían estar acostumbrados al toro. Pero mira por donde, hasta los valientes tienen miedo.
Espero que los antitaurinos sepan entenderme, que estoy seguro que los ha por ahí que piensan que enfrentarse a un toro no es valentía sino locura. No estoy deciendo eso, ¿eh?
Y yo, a los nuevos amigos, como al toro, hay que cogerles por los cuernos.
También se da la situación de querer que ese entorno amable que procuran las nuevas amistades dure para siempre. Pero hay que ser conscientes de que en algún momento hay que bajar del monte a la vida real. Y la vida real nos dice que con los amigos se discute, que los amigos defraudan, que... entonces supongo que tendremos que recordar que siempre nos quedará un monte tabor al que subir para olvidarnos de todo lo mundano que contamine nuestra amistad.
Mientras bajaban del monte, Jesús les prohibió contar lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos.
Ellos cumplieron esta orden, pero se preguntaban qué significaría "resucitar de entre los muertos".
Siempre fue un misterio esta lectura. Si interpretáramos literalmente el texto, Jesús se volvió brillante y blanco. Imagino que adoptó una forma como si de una aparición se tratara (como esas personas que dicen haber visto a la Virgen y te cuentan que no se han cagado de patas abajo). Y encima había voces de ultratumba y todo ("Este es mi hjo amado, el elegido, escuchadle"). Entonces ¿por qué Pedro dijo lo que dio si estaba realmente acojonado?
Una cosa tengo clara. Cuando Pedro dijo que se estaba muy bien, que hicieran tres chozas y se quedaran allí para siempre, quiere decir que el hecho de la transfiguración causó ese sentimiento de paz y ganas de no volver al mundanal ruido. ¿Por qué se llenó Pedro de temor?
En mi vida he conocido a personas que me han entrado por el ojito derecho. Personas que me han despertado gran simpatía y que llego a dejarles hueco en mi estrecho corazón. Y aunque el primer sentimiento que me despiertan es un enorme gracias a Dios por haberlas cruzado en mi vida, viene acompañado ese sentimiento también, como si de la otra cara de la misma moneda se tratase, de un gran miedo a perder toda eso .
Siempre me han dicho que me emociono mucho y pongo demasiado de mi parte al principio de toda relación. Pero nadie sabe el miedo que me entra a perder todo lo bueno que siento que estoy ganando en ese momento. Y creo que Pedro sintió un miedo similar. O, mejor dicho, yo siento un miedo similar al de Pedro. Y me siento como los toreros. Se enfrentan a menudo al mismo miedo, esto es, al toro. Pero si les preguntas si sienten miedo, esperas que te contestes que no, porque deberían estar acostumbrados al toro. Pero mira por donde, hasta los valientes tienen miedo.
Espero que los antitaurinos sepan entenderme, que estoy seguro que los ha por ahí que piensan que enfrentarse a un toro no es valentía sino locura. No estoy deciendo eso, ¿eh?
Y yo, a los nuevos amigos, como al toro, hay que cogerles por los cuernos.
También se da la situación de querer que ese entorno amable que procuran las nuevas amistades dure para siempre. Pero hay que ser conscientes de que en algún momento hay que bajar del monte a la vida real. Y la vida real nos dice que con los amigos se discute, que los amigos defraudan, que... entonces supongo que tendremos que recordar que siempre nos quedará un monte tabor al que subir para olvidarnos de todo lo mundano que contamine nuestra amistad.
7 comentarios:
¿Pero como no les va a prohibir Jesus que cuenten algo? ¡¡¡ les hubieran tomado por una panda de chalados!!! jajaja!!!
¡¡¡Ya le podíam haber preguntado como consiguió esa blancura, que los calcetines de Darío me traen por el monte Tabor!!!
Con lo de las casitas de los tres cerditos creo que la idea era otra, más bien lo que Pedro hacía era trazar el siguiente plan:
"_ Elías, ahora, en cuanto se meta en su choza y se duerma¡¡¡correeeeeeee!!!".
No se si presientes que alguna buena amistad se va a ir al garete, solo espero que no sea la mía, que no ha hecho más que empezar.(Aunque me lo esté ganando a pulso...)
El resto, ...¡qué bonitoooooooo!!!
BESAZO ENDEMONIADO (por aquello de los contrastes)
Bruni: No presiento que ninguna amistad se vaya al garete. Fue lo que evocó en mi mente la lectura del jueves. Igual recordaba tiempos no tan pasados. Ya sabes que la mente humana es muy compleja.
Gracioso el contraste, jeje.
Nacho, pues a mí me has dao en la frente... me siento identificada!
Pero sigo pensando que las buenas gentes no se merecen las desconfianzas que me han provocado las malas... así que me pasa una y otra vez.
Te suena?
Un gran abrazo!
Sundance: Ya tenemos algo en común. Aunque es una verdadera mierda que lo malo que nos pasado nos haga ser tan cautos y perdernos tantas cosas buenas.
quisiera saber en que parte de la biblia esta esto??? acaso lo conoce??? esta utilizando palabras textuales oo...de donde lo saco gracias
Estimado Anónimo:
Seguramente corresponda a la lectura del 6 de agosto de 2009. Tendría que buscar la cita para ponerla. Es textual. Debe tener en cuenta que según la edición, los textos bíblicos cambian. Algunos son traducciones directas del hebreo, otros son traducciones de otros idiomas... Esta correspondería a la editorial EDIBESA. Está sacado del libro EVANGELIO2009, donde viene la lectura que corresponde a cada día y que personas de la Iglesia Católica usan para sus oraciones en cualquier parte del mundo.
La cita es Mc 9, 2-10.
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